El espectacular crecimiento de Fermín López no ha pasado desapercibido en el fútbol europeo. Con solo 22 años, el centrocampista del FC Barcelona ha despertado el interés de dos gigantes del continente: el Chelsea y el Bayern de Múnich, clubes que estarían dispuestos a poner sobre la mesa más de 50 millones de euros para intentar llevárselo este verano.
Sin embargo, el Barça no tiene ninguna intención de negociar su salida. En los despachos del club azulgrana lo consideran una pieza estratégica para el futuro del equipo y no están dispuestos a escuchar ofertas, por muy altas que sean. Fermín es uno de los grandes activos surgidos de la cantera en los últimos años, y su evolución ha sido meteórica.
Un talento que enamora a media Europa
El Chelsea lleva meses siguiendo de cerca a Fermín. Su perfil encaja en el proyecto de reconstrucción del club londinense: joven, con gran proyección y capacidad para llegar al área rival desde segunda línea. El Bayern, por su parte, lo ve como un relevo generacional ideal para reforzar su centro del campo, que esta temporada ha perdido frescura e intensidad.
Ambos clubes han realizado ya sondeos preliminares y están dispuestos a tirar la casa por la ventana, convencidos de que Fermín tiene el talento para ser uno de los mejores mediocampistas del mundo en los próximos años. No obstante, tanto en Londres como en Múnich son conscientes de que la operación es prácticamente inviable en este momento.
El Barça, firme: "Fermín no se vende"
Desde la dirección deportiva, encabezada por Deco, el mensaje es muy claro: Fermín es intransferible. Ya se han rechazado los primeros acercamientos y en el club están convencidos de que su valor seguirá creciendo a medida que gane protagonismo en el primer equipo.
Hansi Flick comparte esa visión. El técnico alemán tiene grandes planes para Fermín y ha trasladado a Joan Laporta su intención de darle muchos más minutos la próxima temporada, tanto como interior como en un rol más ofensivo, donde puede explotar su capacidad de llegada y remate.
El jugador tampoco tiene dudas
Fermín, por su parte, no tiene ninguna intención de salir. Se siente valorado en el Barça, está feliz en el club de su vida y no escuchará ofertas. Su sueño siempre ha sido triunfar en el primer equipo, y está convencido de que su mejor etapa aún está por llegar. Su entorno también descarta cualquier tipo de negociación con otros clubes, pese a las cifras astronómicas que puedan llegar desde Inglaterra o Alemania.
Fermín seguirá en el Barça, blindado por el club y comprometido con el proyecto. Un talento formado en La Masia que ya ha demostrado que está preparado para asumir galones y que, si todo sigue su curso, será uno de los grandes nombres del futuro azulgrana.