Eric García es una de las salidas que prácticamente están confirmadas en el Barça. Es prácticamente imposible que siga otra temporada más, viendo el papel residual que está teniendo después de regresar del Mundial de Qatar, donde tampoco disputó ni un solo minuto. Confiaba en poder recuperar el ritmo competitivo a las órdenes de Xavi Hernández, pero se ha encontrado con la dura realidad: ha perdido por completo la confianza del entrenador.

Así se ha podido comprobar en los últimos meses de competición, siendo suplente habitual. No ha tenido prácticamente participación, y ha pasado a ser la última opción en las rotaciones defensivas. Marcos Alonso, Jules Koundé, Ronald Araújo y Andreas Christensen están por delante de él en las preferencias del técnico de Terrassa, y ha autorizado a Joan Laporta y a Mateu Alemany su salida. De modo que apunta a marcharse traspasado.

Si llega una buena oferta, la estudiarán detenidamente, y esperan poder recaudar unos 15 millones de euros con el central de 22 años. En el Camp Nou ya no creen que algún día pueda explotar todo el potencial que se le veía en sus inicios, ni convertirse en una pieza importante. Así que la segunda etapa del internacional español por el conjunto azulgrana apunta a ser muy breve, y durar solamente dos campañas, donde ha dejado pocos momentos destacados, y sí muchos errores graves.

Por desgracia para Eric, en el Barça ya tienen cerrado un fichaje que llegará para ocupar su puesto. Porque el acuerdo con Íñigo Martínez está apalabrado, y se incorporará a coste cero en el próximo mes de julio, momento exacto en el cual finaliza el contrato que tiene con el Athletic Club de Bilbao. A pesar de los intentos que han hecho los vascos para retener a una de sus principales estrellas, tiene decidido cambiar de aires desde hace tiempo.

Y su destino predilecto es el proyecto de Xavi. La mujer del veterano futbolista de 32 años está buscando casa en la ciudad condal, y le han reservado el dorsal ‘3’ que dejó libre Gerard Piqué tras su retirada.

Íñigo deja plantado al Atlético de Madrid

La incorporación de Íñigo al Barça había quedado paralizada cuando se conoció que Xavi prefería buscar otras alternativas para el eje de la retaguardia, y de eso se quiso aprovechar el Atlético de Madrid. Enrique Cerezo llegó a contactar con el ex de la Real Sociedad, y pretendía adelantarse en la subasta.

Sin embargo, finalmente Laporta y Alemany conseguirán llevarse a Martínez.