Lo sucedido en el partido entre Brujas y Barça no puede quedar impune. Hansi Flick no quiere ni puede tolerar el bajísimo nivel mostrado por la mayoría de sus jugadores, los cuales estuvieron especialmente mal cuando tocaba defender y trabajar atrás. El conjunto culé no estuvo del todo desacertado de cara a puerta; gracias a eso y a la magia de Lamine Yamal sacó un empate y no una sonrojante derrota en la ciudad belga de Brujas. Y dentro del grupo de jugadores a los que más responsabiliza Flick, está Alejandro Balde, que hizo un muy mal partido y convirtió su banda, al igual que Koundé, en una autopista para sus rivales, que avanzaron sin problema por ahí.

Ante esta situación, Flick no tiene otra opción que la de buscar alternativas. Balde no ha estado a buen nivel en toda la temporada y el equipo se ha resentido mucho por ello. El joven carrilero español no encuentra la forma de ayudar al equipo y, a pesar de que su velocidad sirve para tapar algunos de sus errores, la realidad es que este año está tan desacertado que ni corriendo a máxima velocidad es capaz de subsanar lo que hace mal.

De titular en Champions a suplente en Vigo

Es por todo esto que Hansi Flick tiene más que claro que el paso a dar es el de dar la titularidad a Gerard Martín en Vigo. El catalán no tendrá las cualidades que sí tiene Balde, pero en cambio sí es capaz de ofrecer un rendimiento mucho más regular y seguro a nivel defensivo. El catalán es un jugador mucho más centrado y con mayor concentración que Balde, que a veces confía demasiado en sus capacidades físicas y atléticas y deja demasiado espacio al rival.

Alejandro Balde
Alejandro Balde

De este modo, todo apunta a que en Balaídos, el once tendrá varios cambios y uno de ellos será la entrada de Gerard Martín, que ya se prepara con la mente puesta en una de sus grandes oportunidades. Y es que, si es capaz de cuajar una buena actuación ante el Celta, va a dar motivos de sobra a Flick para que apriete el gatillo y haga un cambio en su once tipo.

Balde debe mejorar mucho

Así pues, todo tiene sus consecuencias y Alejandro Balde ya sabe que no puede repetir actuaciones como la del pasado jueves. Y es que en el Barça, donde la exigencia es máxima, uno no se puede relajar ni cometer tantos errores en un mismo partido.