En el Barça ya se trabaja de cara al final de la etapa de Robert Lewandowski no será eterno y el club necesita anticiparse a su relevo sin hipotecar la economía. En ese contexto, Deco ha puesto sobre la mesa un nombre que genera debate pero también ilusión en la dirección deportiva. Se trata de Rasmus Hojlund, delantero danés del Manchester United, actualmente cedido en el Nápoles, y al que el Barça ve como una oportunidad de mercado muy similar a la operación diseñada con Marcus Rashford.
El Barça no puede afrontar grandes traspasos inmediatos, pero sí explorar fórmulas creativas. Deco considera que Hojlund encaja perfectamente en ese perfil: joven, con proyección, margen de crecimiento y una situación contractual que permite negociar. Por eso, ya se estudia una cesión con opción de compra, pactada con el Manchester United, que mantendría el control del jugador.
Una apuesta de futuro con sello Flick
A sus 22 años, Hojlund es visto como un delantero moderno, potente físicamente, con capacidad para atacar espacios y con instinto goleador. En el Barça creen que su etapa en Italia le está ayudando a madurar y a ganar recursos tácticos, algo clave para adaptarse al fútbol que exige Hansi Flick. El técnico alemán valora especialmente su intensidad, su trabajo sin balón y su capacidad para fijar centrales.
Deco está convencido de que, bien trabajado, Hojlund puede dar un salto de nivel importante en el Barça. No sería una apuesta inmediata para ser titular indiscutible desde el primer día, pero sí un delantero pensado para crecer y convertirse en el mejor heredero de Lewandowski. Flick, por su parte, prefiere un jugador más hecho, pero entendiendo la realidad del club, el danés no es una opción desdeñable.
Una fórmula low cost que seduce al Barça
La clave está en la fórmula. El Manchester United no termina de confiar plenamente en Hojlund como su delantero titular y está abierto a soluciones. El Barça quiere aprovechar ese contexto para repetir una operación similar a la de Rashford, con poco riesgo inicial y margen de maniobra.
En los despachos consideran que el danés puede ser una sorpresa positiva. No llega con el cartel de estrella, pero sí con hambre y potencial, dos factores que en el Barça actual se valoran más que nunca. De este modo, Deco mueve ficha con discreción pero con una idea firme de encontrar al sucesor de Lewandowski sin copar portadas, pero con puntería.