Uno de los grandes desafíos del Barça cada verano es el de retener a todas las perlas que hay en sus categorías inferiores, un reto muy complicado. Y aunque en los últimos años se haya ido reduciendo la cantidad de jugadores que deciden irse, debido a las oportunidades que de nuevo hay en el primer equipo, con ejemplos como los de Lamine Yamal, Pau Cubarsí, Marc Bernal, Héctor Fort, Marc Casadó, Fermín López o Alejandro Balde, no siempre se puede tener éxito.
Y es que hay muchos futbolistas que no son capaces de decir adiós a las propuestas millonarias que llegan desde el extranjero, como fueron los casos de Joel López, de Adrián Bernabé, de Juan Larios, de Iker Bravo, de Andrea Natali o de Marc Jurado. Por suerte, en las últimas horas han podido concretar la renovación de una joya que afirman que es una de las grandes esperanzas de La Masía, y tiene todo lo necesario para marcar una época. Su nombre es Baba Kourouma.
A pesar de estar todavía en edad cadete, este año ha sido un fijo en el Juvenil B, campeón en su grupo de Liga Nacional, e incluso ha podido jugar varios partidos con el Juvenil A. Durante prácticamente toda su carrera ha actuado como centrocampista, gracias a su increíble superioridad física y a su calidad individual, pero se ha acabado asentando como un central con una privilegiada salida de balón, y una personalidad muy madura para ser tan joven.
Los entrenadores que lo han tenido destacan que es un líder dentro y fuera del terreno de juego, y que está preparado para poder dar el salto al filial en un futuro cercano, e incluso tener su momento en el Camp Nou. Hans-Dieter Flick no lo pierde de vista, y Joan Laporta y Deco tenían muy claro que merecía la pena hacer un esfuerzo para retenerlo, y que firme su primer contrato profesional, ahora que ya ha cumplido los 16 años.
Porque no había tardado en recibir algunas ofertas muy interesantes, como una del Manchester City, y otra del Borussia Dortmund y del Olympique de Lyon…
Baba Kourouma, el hermano de Ilaix Moriba
Baba Kourouma ha permanecido fiel al Barça, un caso totalmente opuesto al de su hermano mayor, Ilaix Moriba, quien en su momento también era una de las grandes promesas del club.
Viendo como le han ido las cosas a su hermano, probablemente habrá optado por permanecer en el equipo.