Ha vuelto el fútbol. Alemania se ha convertido en el banco de pruebas poscoronavirus después del retorno de la Bundesliga. Entre el sábado, el domingo y el lunes pasado se celebró la primera jornada de fútbol en una gran liga europea después de volver más o menos a la normalidad. Nueve partidos y muchas conclusiones.
Alemania se moviliza por el fútbol
Sin saludos sobre el césped, celebraciones de goles a distancia, con mascarilla en el banquillo y estadios sin público. El fútbol ha cambiado en algunas cosas, pero también sigue rodando el balón. Los equipos siguen compitiendo sobre el césped y cada uno trata de ganar para conseguir sus objetivos.
Mirando un mapa de Alemania se nota claramente como en el fútbol no hay distinciones. La jornada 26 de la Bundesliga se ha disputado donde tocaba y en estadios de todo el territorio, de hasta siete länder repartidos de norte a sur y de este a oeste, sin mirar qué regiones han sido más castigadas por la Covid-19. Así pues, una de las conclusiones que nos deja es que si las competiciones vuelven, se tienen que hacer en igualdad de condiciones y tal como se había hecho hasta ahora: jugando cuando toca y completando la jornada en el mismo fin de semana.
Bundesliga 2019-20: jornada 26
No hay opción que se dispute un partido en Augsburgo y que no se juegue otro en Bremen. Cuando vuelva la Liga Santander, aunque la región sanitaria de Mallorca haya superado las tres fases del desconfinamiento y Barcelona todavía esté dentro de la fase 2, el fútbol tendrá que disputarse en todas partes.
Este hecho deja patente que otra vez el mundo del fútbol en España come aparte de la sociedad. Justo o injusto, ya han quedado demostrados los privilegios este mismo lunes cuando aunque algunos equipos todavía viven dentro de la fase 0, ellos ya han dado tres pasos más y han empezado los entrenamientos en grupos.
