Ya es oficial. El Barça-Nápoles de Champions del próximo 18 de marzo (21 h) se jugará a puerta cerrada por el coronavirus. Así se ha confirmado este martes en una reunión en el Departamento de Salut de la Generalitat, al lado del Camp Nou, entre los representantes del Barça y de Sanitat.

Pérdidas de 4,5 millones de euros para el Barça

El Barça quería jugar el partido con público, disputarlo a puerta cerrada supone unas pérdidas de 4,5 millones de euros para el club porque tendrán que devolver el importe de las entradas vendidas o las que se habrían vendido. En todo caso, la intención de la entidad blaugrana era aceptar las medidas tomadas por Sanitat.

En la reunión han asistido por parte del Barça el CEO del club, Òscar Grau; el director de las secciones, Albert Soler, y el jefe de Servicios Médicos del club, Ramon Canal. Por otra parte, había el secretario de Salut Pública, Joan Guix; la secretaria general de Salut, Laura Pelay; el secretario de Interior, Brauli Duart, y el secretario general de l'Esport de la Generalitat, Gerard Figueras.

Decisión por "razones sanitarias"

"Es una decisión que se ha tomado por razones sanitarias estrictamente", ha asegurado Guix después de la reunión celebrada. El Camp Nou vivirá otra jornada a puerta cerrada, como en el día del referéndum del 1 de octubre del 2017 en el partido contra Las Palmas.

Barça Las Palmas celebracio gol EFE

EFE

Deportivamente, el Barça cuenta con una pequeña ventaja contra el Nápoles: en Italia quedaron 1-1. Los culés no podrán contar con el apoyo de sus aficionados, pero la intención, en cualquier caso, es pasar a los cuartos de final de la Champions de la manera que sea.

El coronavirus sigue afectando de lleno a los eventos deportivos de este 2020. Este lunes se supo que el deporte se detiene en Italia hasta el 3 de abril, pero ya son muchos los casos de Grandes Premios de Fórmula 1 y MotoGP cancelados, de partidos aplazados, de vueltas ciclista suspendidas y ahora de duelos de fútbol sin aficionados.