Fabio Capello regresó al Real Madrid en la temporada 2006-2007 para encarar una nueva etapa con el objetivo de aportar disciplina y orden a un vestuario cargado de talento. Esta segunda etapa llegó después de unos años convulsos para el club, con resultados irregulares y tensiones entre las estrellas del conjunto blanco. Capello, conocido por su mano firme y exigencia absoluta, debía gestionar un equipo lleno de jugadores internacionales de primer nivel, algunos ya consagrados y otros con mucho potencial, conocidos por la prensa como los “Galácticos”.

Capello habla claro sobre Ronaldo Nazário

Uno de los casos más mediáticos que Capello tuvo que gestionar en esta segunda etapa fue el de Ronaldo Nazário. El técnico italiano, en unas declaraciones en Italia, no ha escondido las dificultades que tuvo con la estrella brasileña, a pesar de reconocer su enorme talento: “Ronaldo es el mejor jugador que he entrenado. Era un tipo al que le encantaba salir de fiesta todas las noches, era un loco, pesaba 94 kilos y no quería perder peso. En un momento determinado le dije al presidente que teníamos que dejarlo marchar, no había esperanza de progresar. Y así lo dejamos marchar. Pero, repito, es el mejor que he entrenado”. Durante aquella temporada, el Madrid trajo a Ruud van Nistelrooy para reforzar el ataque, hecho que limitó aún más la presencia de Ronaldo.

Ronaldo Nazario Real Madrid / Foto: Real Madrid
Ronaldo Nazário celebrando un gol con el Real Madrid / Foto: Real Madrid

Ronaldo, finalmente, acabó marchándose durante el mercado de invierno. El delantero fichó por el Milan a cambio de 7,5 millones de euros, pero su estancia en Italia estuvo marcada por problemas físicos. En dos temporadas, solo disputó 20 partidos y anotó 9 goles. Tras sufrir una grave lesión de rodilla, volvió a su país para finalizar su carrera en el Corinthians, donde ganó el Campeonato Paulista y la Copa de Brasil en 2009. Durante su primer año con el club brasileño, marcó un total de 23 goles, demostrando que su talento, a pesar de las dificultades, no se había apagado. Finalmente, en la temporada 2010-2011 puso punto final a su trayectoria y se retiró del fútbol profesional.

Ronaldo ya relató sus fiestas

El brasileño, que ganó dos Mundiales y dos Balones de Oro, ya reconoció que durante su etapa en el Santiago Bernabéu vivía intensamente fuera del campo. “Estuve en todas. Jugaba el sábado y después me iba a París. Pasaba el domingo allí y por la noche salía de fiesta. A las siete de la mañana cogía el avión a Madrid, llegaba a las nueve y a las diez ya entrenaba. Esto lo hice muchas veces”, ha explicado. Para él, el ocio era una parte indispensable de su equilibrio personal: “En la ciudad donde juegas, o haces una fiesta en casa o firmas tu muerte. Por eso me diversifiqué y viajaba. Siempre he sido de organizar fiestas y de procurar que todo el mundo fuera feliz”, añadió.