Harry Kane se ha convertido en el objetivo prioritario del Barça de cara a la próxima temporada, tal y como informó el pasado miércoles el diario The Guardian. El delantero inglés, con contrato con el Bayern de Múnich hasta el 2027, tiene una cláusula de rescisión de 65 millones de euros, una cifra que el club blaugrana considera más que correcta teniendo en cuenta la calidad del jugador y la situación del mercado actual, en el que se están pagando auténticas barbaridades por jugadores de segundo nivel.
Ahora bien, el fichaje de Harry Kane no tiene nada que ver con el futuro de Robert Lewandowski, que termina contrato con el Barça este verano. Hansi Flick quiere tener todas las posiciones dobladas y, aunque Ferran Torres está rindiendo a buen nivel como 9, el entrenador alemán prefiere disponer de 2 killers en la plantilla.
Lewandowski se quiere quedar en el Barça y Flick cuenta con él
A todo ello hay que añadir que Robert Lewandowski es partidario de seguir en Barcelona. Tanto él como su mujer son felices en la ciudad, están muy cómodos, hasta el punto de que el polaco está dispuesto a rebajarse notoriamente el salario y a aceptar un rol de delantero suplente a cambio de seguir vistiendo de blaugrana. Lewandowski tiene una importante oferta para ir a jugar a Arabia Saudita, un interés que ya viene de lejos, pero sigue prefiriendo su bienestar y el de su familia a los millones que le prometen para que cambie de aires.
El Barça está pendiente de Hansi Flick, ya que no es totalmente seguro que el alemán vaya a seguir una temporada más. El plan del entrenador alemán siempre fue el de completar un ciclo corto en el club blaugrana, por lo que siempre se habló de 3 temporadas, hasta el 30 de junio del 2027. En el Barça, pues, confían con que Flick vaya a cumplir una temporada más, por lo que están trabajando en el plan de unir a Kane con Lewandowski, dos auténticas leyendas que garantizarían goles al equipo.
Ferran Torres, el gran damnificado de la operación Kane-Lewandowski
Si todo encaja según el plan, que Flick siga hasta el 2027, que Lewandowski encaje económicamente en la masa salarial y que Harry Kane acepte el reto de cambiar el Bayern por el Barça, la siguiente duda a resolver será el futuro de Ferran Torres. Flick está encantado con el valenciano, pero su posición en el equipo quedaría muy comprometida.
Es cierto que Ferran Torres empezó su carrera deportiva como extremo y que podría pasar a ser el suplente de Raphinha, aunque Flick ya ha demostrado preferir jugadores de banda con desborde, como Lamine Yamal, Rashford y Roony, o con capacidad para romper líneas con diagonales, como Raphinha. Ferran aporta capacidad de trabajo y juego de combinación, pero no termina de ser el perfil de extremo que le gusta a Flick, por lo que, sin sitio en el centro de la delantera, su futuro en el Barça estaría, como mínimo, en entredicho.