El Barça vuelve a estar en el radar de uno de los talentos jóvenes más prometedores del fútbol español. En los últimos días, el nombre de Yeremay Hernández ha vuelto a aparecer sobre la mesa de Deco tras un nuevo ofrecimiento procedente de su entorno. El extremo canario del Deportivo de La Coruña siempre ha tenido claro su deseo de vestir de azulgrana y no ha ocultado que ve el Camp Nou como el escenario ideal para dar el gran salto en su carrera.
En el Barça conocen bien el perfil del jugador. Yeremay es talento puro, desborde, uno contra uno y personalidad. Sin embargo, a día de hoy no es una prioridad para Hansi Flick, que considera que la posición de extremo derecho está bien cubierta. Aun así, el contexto del mercado y ciertas operaciones que siguen abiertas obligan al club a no cerrar ninguna puerta de forma definitiva.
Yeremay, una alternativa real para el ataque
Dentro del club, Yeremay es visto como un posible relevo natural de Raphinha en determinadas fases de la temporada. Su perfil es distinto, con mayor regate, pero aporta soluciones en partidos cerrados y tiene margen de crecimiento. En ese sentido, el Barça valora que sea un futbolista joven, con hambre y con una clara predisposición a asumir un rol progresivo sin exigir galones desde el primer día.

Además, su conocimiento del fútbol español y su adaptación inmediata a LaLiga juegan a su favor. Flick no quiere un vestuario sobredimensionado, pero sí perfiles que puedan crecer bajo su tutela. Yeremay encaja en esa idea, aunque su llegada está directamente ligada a lo que ocurra con otros objetivos ofensivos que maneja la dirección deportiva.
Rashford marca el camino del mercado
Y es que el gran condicionante es Marcus Rashford. El delantero inglés lo está haciendo muy bien en su paso por el Barça. De este modo, si el fichaje del inglés no se concreta, Yeremay ganaría peso como alternativa. El aspecto económico también es clave. El Deportivo no pondrá fácil la salida de su estrella, pero en el Barça manejan cifras claras y el traspaso no debería superar los 30 millones de euros. Una cantidad asumible si se compara con otros objetivos y que encaja en la política de fichajes de talento joven que impulsa Deco.
Así pues, sin ser una prioridad urgente, el nombre de Yeremay vuelve a estar sobre la mesa. El Barça no lo descarta y, si el mercado gira en su favor, la gran joya del fútbol español podría acabar vistiendo de azulgrana.