Día de estrenos, día de ilusiones y también día histórico. Pero también día muy destacado porque el clima político ha protagonizado un nuevo partido del Barça en el Camp Nou. Esta vez con más fuerza que nunca. El nuevo derbi catalán también ha tenido una importante presencia en la grada.

El Girona ha vivido un debut de Liga en el campo del Barça que siempre quedará guardado en el recuerdo. Y esta fecha tan señalada también ha pasado a ser un día de reivindicación y de reclamaciones constantes por parte de la afición.

Los 85.417 espectadores que han asistido al partido han clamado de forma casi unánime por la independencia de Catalunya en los ya habituales cánticos durante el partido y en los minutos 17 con 14 segundos de las dos partes. Pero la cosa no se ha acabado aquí y también se ha vuelto a reclamar la libertad de los presos políticos. Dos cánticos que han sido contundentes en una jornada diferente. Ni el azul, ni el rojo ni el blanco, sino que amarillo se ha convertido en el color más destacado.

Clima político-deportivo

El momento político que vive actualmente Catalunya, junto con la tensión dentro de la sociedad, ha sido reivindicada nuevamente en el mundo del deporte. Roger Torrent, el presidente del Parlamento de Catalunya, ha podido ver en directo y desde el palco cómo se han ido sucediendo los hechos en el Camp Nou. Y acompañados de los dos presidentes, Josep Maria Bartomeu y Delfí Geli, además de otras personalidades.

Josep Maria Bartomeu Delfí Hiele a Roger Torrent Camp Nou Barça Girona Efe

Ha sido una jornada donde los lazos amarillos han seguido apareciendo en las solapas de los aficionados, dos grandes pancartas con las palabras 'Llibertat' y 'Freedom' han sido mostradas antes del partido, y mientras tanto se hacían las reclamaciones acompañadas de pancartas individuales que pedían la libertad de los presos y que han pintado el panorama de color amarillo.

Los llamamientos de cariz político no han desentonado porque el espectáculo también ha llegado sobre el césped. Siete goles y una gran goleada del Barça. Pero esta vez el protagonismo también ha pasado por la afición.

Se ha vuelto a demostrar que se quiera o no se quiera admitir, la política y el deporte van de la mano. Y en Catalunya más que nunca. En este nuevo derbi catalán de la máxima categoría del fútbol español ha sido muy reivindicativo. Histórico e independiente. Los culés y los gerundenses hablan desde la grada.