Ya es oficial. Los atletas rusos se quedan fuera de los juegos de Río. El Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) ha desestimado por unanimidad la solicitud que 68 atletas rusos presentaron sobre su exclusión por parte de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) por el dopaje de Estado.

Así lo ha anunciado el TAS a través de un comunicado en su web, en el que se puede leer que acatan la decisión que la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF) tomó el 13 de noviembre del 2015, cuando suspendió la Federación Rusa de Atletismo (RUSAF) de formar parte de la asociación. El IAAF ratificó esta suspensión el 26 de noviembre y el 17 de junio de este año, cuando dejó la puerta abierta a los competidores que están limpios y queda a la espera la decisión del Comité Olímpico Internacional (COI).

De acuerdo con el artículo 22 de las normas del IAAF, los atletas que son de un estado suspendido por el IAAF no son aptos para las competiciones que están debajo el paraguas de este organismo, y la RUSAF está suspendida actualmente. Estas competiciones incluyen los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.

Ahora bien. El TAS explica que no tiene las competencias para determinar "si COI tiene derecho a aceptar o rechazar la entrada de los atletas sean representantes de la Federación Rusa o atletas neutrales". Esta decisión deja fuera de juego atletas tan destacados como la pertiguista Yelena Isinbayera o el vallista Sergei Shubenkov.

EL AMA quiere toda Rusia fuera

La Agencia Mundial Antidopaje (AMA) -que fue la primera a acusar a Rusia del dopaje de estado- ha hecho un llamamiento a impedir la participación de los rusos en todas las competiciones internacionales hasta que no cambien en eso, incluidos los Juegos de Río, porque "los descubrimientos del informe muestran un ataque chocante y sin precedentes a la integridad del deporte y de los Juegos Olímpicos".

Está precisamente donde entra en juego la figura del COI que, como ha asegurado su presidente, Thomas Bach, "no dudará al aplicar las sanciones más duras disponibles", aunque no anunciará el veredicto hasta este fin de semana.

Fabricar ganadores...

El dopaje de estado ha dejado Rusia fuera de juego. Ya en el 2014, un documental alemán revelaba cómo Rusia fabricaba ganadores a través del dopaje. Eso fue la chispa que encendió la llama porque entonces la excabeza del laboratorio antidopaje ruso, Grigori Rodtchenkov, afirmó que al menos 15 medallistas olímpicos se habían beneficiado de este programa durante los Juegos de Invierno de Sochi del 2014.

El informe de la investigación, en más, explica cómo "el laboratorio de Moscú operó para la protección de los atletas rusos dopados con un sistema promovido por el Estado", que lo describen como "Metodología para la Desaparición de Positivos". Un ejemplo de eso es que al final de los campeonatos del mundo, el laboratorio ruso "apartó muestras con resultados positivos, los sacó los tapones y los reemplazó por orina sucia" antes de que fueran enviadas al laboratorio que las tenía que analizar.

Pero el amo de estas muestras de orina ni siquiera coincidían con la identidad de los atletas y, además, el suyo análisis revelaba que se había extraído el tapón.

...con cócteles de esteroides

Y es que el propio Rodtchenkov confesó que él mismo había fabricado un cóctel con tres esteroides disueltos con güisqui para los hombres y en Martini para las mujeres, concretamente un miligramo por cada mililitro de alcohol. Estos esteroides, de rápida absorción, ayudaban a los deportistas a recuperarse y reducían el tiempo de detección de los controles antidopaje.

Pero la cosa no acaba aquí. Los mismos deportistas llevaban encima latas de refresco y biberones con orina limpia que la intercambiaban con la orina alterada por los esteroides.

Casualmente -o no-, después de que Rodtchenkov confesés, en febrero de este año encontraron muertos a dos exagentes antidopaje rusos. Uno por causas desconocidas y el otro por un supuesto ataque cardiaco.