La victoria del Girona en Leganés (0-2) parece que hizo daño en ciertos sectores de la afición local, y es que este domingo una seguidora del conjunto pepinero ha acusado al capitán gerundense, Àlex Granell, de haber despreciado su equipo. A través de Twitter, una usuaria ha denunciado que el futbolista rojiblanco gritó "son un equipo de Segunda" en la celebración de uno de los goles de Portu.

Rápidamente Granell ha desmentido la información, pero la tuitera ha contestado afirmando que "estaba en la segunda fila y lo escuchó todo el mundo". Que la acusación sea cierta no se puede demostrar, pero la realidad es que Granell -profesor y psicopedagogo- se ha ganado a varios enemigos en la capital de España por haber defendido la inocencia de los presos políticos catalanes.

Esta es la segunda polémica que rodea el Leganés-Girona, después de que se revelara que el club madrileño había censurado banderas y pancartas de los aficionados gerundenses en el estadio de Butarque. Como el partido coincidía con la manifestación por la liberación de los presos en Madrid, la entidad pepinera quiso impedir que los seguidores catalanes exhibieran consignas políticas en su feudo.