Este 2021 hace 20 años que se estrenó Mulholland Drive, una de las mejores películas (originalmente ideada com una serie) de David Lynch, autor con una filmografía llena de referencias sublimes. Un aniversario que los cinéfilos están pudiendo celebrar con su reestreno en las salas.
El punto de entrada de extraterrestres
Dice el filósofo francés Jean Baudrillard en su libro America que Mulholland Drive es "el punto de entrada de los extraterrestres". Es una metáfora para referirse a esta cerretera como la puerta de entrada en Los Angeles, aquella jungla a la cual se referían Guns N'Roses en su tema 'Welcome to the Jungle', de todas las criaturas singulares y extrañas que llegaban a la ciudad.
William Mulholland nació en Belfast el 11 de septiembre de 1855. Sólo tenía 15 años cuando emigró a Estados Unidos. Primero se estableció en Nueva York. Buscando fortuna, como tantos otros acabó marchándose hacia el oeste. Ahói trabajó como minero en Arizona para finalizar su particular peregrinaje a Los Ángeles.
Ingeniero autodidacta, entró a formar parte del Departamento de Agua y Energia de Los Angeles, agencia de la cual acabó siendo su director. Su gran proyecto fue el acueducto de Los Angeles, una megaestructura todavía ahora fundamental para el funcionamiento de la urbe californiana. La Mulholland Drive le debe su nombre.
Mulholland Drive vuelve a las salas de cine para celebrar su 20 aniversario
En caída libre
Vía de dos carriles que recorren las montañas de Santa Mònica y Hollywood Hills, con impresionantes vistas a Los Angeles y el Valle de San Fernando, la Mulholland Drive es uno de los puntos más representativos de la ciudad al esconder el icónico cartel del Hollywood Sign. Un símbolo de la cultura pop que ha inspirado a todo tipo de artistas. Tom Petty hablaba de ella en 'Free Fallin'', lo mismo que R.E.M en 'Electrolite' o Panic! At the Disco en 'L.A. Devotee'.
Mulholand Drive también es donde David Lynch ubicó el punto de partida de su película homónima. Un thriller psicológico al estilo opresivo y simbolista del particularísimo cineasta norteamericano. Una joya del séptimo arte en una filmografía rebosante de títulos incunables.
La llave azul
Una mujer de pelo oscuro, papel interpretado magistralmente por Laura Harring, es la única superviviente de un accidente de coche en Mulholland Drive. Herida y en estado de shock, baja andando hasta Los Angeles donde se cuela en un apartamento propiedad de una aspirante a actriz de nombre Betty Elms (Naomi Watts).
Cuando Betty llega a casa se encuentra a la mujer, que tiene amnesia y asume el nombre de Rita, después de ver en el apartamento un póster de la película Gilda, protagonizada por Rita Hayworth. Para ayudar a la mujer a recordar su identidad, Betty busca en el bolso de Rita, donde encuentra una llave azul (uno de aquellos objetos llenos de simbolismo tan habituales en las obras de Lynch) y 125.000 dólares en efectivo.
Cartel original de la película de David Lynch Mulholland Drive
Una película en serie
David Lynch se adelantó a la edad de oro de las series de televisión con Twin Peaks, producción sublime que, originalmente, la primera y la segunda temporada, se estrenaron el año 1990 (la tercera no llegó hasta el 2017). Desde entonces no había vuelto a explorar en el formato.
Mulholland Drive fue su intento por volver a la pantalla pequeña. Una idea que vendió a la ABC después de escribir el esbozo de un guion de su capítulo piloto. Cuando meses después el cineasta les entregó aquel primer episodio que había empezado a rodar en febrero de 1999, los directivos del canal quedaron totalmente descolocados. No entendieron nada. No les gustó nada. Cancelaron el proyecto.
La noche que lo cambió todo
"Una noche, me senté, surgieron las ideas y fue una experiencia muy bonita. Todo se vio desde un ángulo diferente... Ahora, mirando hacia atrás, veo que (la película) siempre quiso ser así. Simplemente tomó este extraño comienzo para que fuera lo que es". Así describía David Lynch el momento epifánico en que el guion para el capítulo piloto se transformó en la narración para la película.
Lynch conservó buena parte del metraje original para la televisión, añadiendo nuevas escenas rodadas a partir de la ampliación del guion después de aquella noche reveladora. El resultado es un onírico ejercicio de cine neo-noir. Una película que es como un gran sueño (o una gran pesadilla) al que es inútil buscarle sentido. Si lo intentáis, os perderéis. No lo tiene. Mulholland Drive es un reto para los sentidos, una suma de emociones, desde las más luminosas a las más oscuras, interpelando directamente el espectador.
Mulholland Drive es uno de los mejores ejercicios cinematográficos de David Lynch y una de las mejores películas de la primera década del nuevo milenio. Una obra de visionado imprescindible para todos los amantes del cine que ahora, coincidiendo con el 20 aniversario de su estreno, podéis volver a ver en pantalla grande en su reestreno en salas.