El festival gerundense de artes escénicas Temporada Alta prevé que la edición del 2020, a celebrar en otoño, "reflejará la situación" de crisis sanitaria que vive el país por el coronavirus. Su director, Salvador Sunyer, ha asegurado que "seguro que habrá referencias" al virus y el confinamiento que está viviendo buena parte del mundo. Además, Sunyer ha alertado de que la Covid-19 pasará factura a la programación. Si bien ya tenían un grueso de espectáculos internacionales cerrados, la incertidumbre de la movilidad y las restricciones que tendrá cada país hace que no se pueda concretar qué compañías vendrán y cuáles no. Además, el director ha adelantado que habrá "más presencia del país" con las producciones de lo que han podido hacer sus giras y la programación se cerrará "sobre la marcha".

El coronavirus está afectando a muchos niveles y eso tendrá un impacto en la economía y la sociedad, en primer nivel. Y parte de este impacto se acabará trasladando al mundo cultural. Uno de los ejemplos será la programación del Festival Temporada Alta que se hace a diferentes municipios de las comarcas gerundenses. Su director, Salvador Sunyer, ha alertado de que este otoño se hará "un festival parecido a las ediciones anteriores", pero que la programación se adecuará "más a las circunstancias que a la voluntad".

De hecho, Salvador Sunyer ha avanzado que el Temporada Alta de este otoño "reflejará la situación" que vive el país y también el resto del mundo estos días. El director ha asegurado que "quizás no será reflejado de forma directa, pero seguro que habrá referencias" buena parte de los espectáculos que haya.

La pandemia está afectando a diferentes niveles a la organización del festival. En primer lugar, el director ha alertado de que el presupuesto se reducirá porque bajarán las aportaciones de los sponsors.

Los organizadores del festival tenían "una parte" de la programación internacional cerrada, que ahora quieren mantener. De todos modos, la incertidumbre de las restricciones de movilidad y la situación sanitaria impiden prever qué espectáculos se mantienen y cuáles no. Sunyer ha detallado que estos días, cuando reservan los vuelos de las compañías que vendrán, las aerolíneas "avisan de que no saben si los aviones podrán despegar". Eso hace difícil asegurar las producciones que se mantendrán de cara al otoño.

Además, el director ha adelantado que habrá "más presencia del país" con algunas de las compañías teatrales que no han podido hacer su gira estos meses. El director ha asegurado que aquellas producciones que hayan cancelado sus estrenos podrían tener un sitio en el festival. "Programaremos el que podamos y lo que nos parezca que está bien", ha añadir a Salvador Sunyer.

Una programación "sobre la marcha"

Ante todas estas incertidumbres, el director del festival de artes escénicas ha lamentado que la programación se irá cerrando "sobre la marcha". Salvador Sunyer ha afirmado que su voluntad es "que se haga teatro y que haya música" y a partir de este punto de salida "se adaptará lo que se pueda hacer".

Sobre las posibles restricciones de público, Sunyer confía en que en otoño ya se puedan abrir todos los equipamientos con todas las localidades disponibles, aunque tampoco pone la mano al fuego. "Todo el mundo confiaba en que se podría hacer la programación escénica de mayo y de junio y no será así", ha concluido al director del festival.