Como en los últimos años, la Plataforma per la Llengua ha organizado un acto reivindicativo coincidiendo con las fechas de Sant Jordi. En esta convocatoria se trataba de crear, en la plaza Comercial, frente al Born, una gran Rosa de los Vientos, que simbolizaba las diferentes variantes de la lengua catalana. Se había convocado bajo el eslogan "Crida-ho als quatre vents. El català llengua comuna", y se había preparado con un spot grabado por los hombres del tiempo catalanes.

El acto

El encuentro del Born pretendía, como en otras ocasiones, convertir a los asistentes en parte de una gran performance política. Se trataba de formar, con un grupo de voluntarios con camisetas rojas, procedentes de todo el territorio lingüístico, una gran Rosa de los Vientos. La Rosa ha ido girando, y cada vez que uno de los vértices llegaba al norte, los miembros de la estrella gritaban "Hablo el catalán" en los diferentes dialectos. Así, la Rosa ha hecho ocho paradas en que se ha gritado en catalán nord-occidental (parlo lo català), central (parlo el català), septentrional (parli el català), valenciano (parle el català), mallorquín (xerr es català), menorquín (rall es català), ibicenco-formenterenco (parl es català) i alguerés (parl lo català). Ha sido un éxito organizativo, aunque ha tenido una participación discreta (unas 400 personas).

El mural

A medida que iba girando la rosa, ocho catalanes de origen extranjero han ido destapando un mosaico con referencia a la variedad dialectal de la lengua catalana. El acto era amenizado por el DJ Xerramequ, y el presentador era el actor Ricard Borràs. El acto se ha cerrado con un vermú. No ha habido presencia de representantes políticos de primera línea, pero ha asistido la subdirectora de Política Lingüística, Marta Xirinachs. 

Apuesta por la integración de los recién llegados

El manifiesto ha sido leído por ocho delegados, en representación de cada uno de los grupos dialectales. Todos ellos eran originarios de países extranjeros. En el texto se dejaba claro que en los Països Catalans, hoy por hoy, se hablan más de 300 lenguas, y que "la defensa del catalán es la defensa de todas nuestras lenguas". El manifiesto rechazaba "el uso de la lengua como herramienta de confrontación política". Y con la lectura colectiva se quería hacer visible que el catalán supone "unidad en la diversidad". El presidente de la organización, Òscar Escuder, acompañado de la vicepresidenta, Mireia Planas, han aclarado que este lema va destinado por una parte a remarcar la base común de todos los grupos lingüísticos del catalán, pero también a recordar que hay catalanes de orígenes bien diferentes, y que todos pueden tener el catalán como patrimonio común.

Optimismo hacia los cambios políticos

Òscar Escuder valora positivamente los cambios políticos que se han producido en el País Valencià, en Balears y en Aragón. Cree que en los tres casos ha habido un cambio de sensibilidad con respecto a la lengua catalana. En cualquier caso, puntualiza que "veníamos de estar tan mal que era imposible ir a peor". No tiene claro hasta donde llegará el cambio impulsado por las nuevas administraciones, pero le parece muy positivo que en Balears ya haya en marcha un decreto para exigir a los funcionarios el conocimiento del catalán. Ahora bien, la Plataforma ha reclamado en el manifiesto que para el mantenimiento de la lengua, es esencial que el catalán sea lengua vehicular en la enseñanza.

En el territorio francés, peor

En cambio, Òscar Escudé no valora de la misma forma la situación del catalán en la Catalunya Nord. Cree que el gobierno de París es extremadamente centralista, "siguiendo la tradición francesa", y que no muestra ninguna voluntad de cambio. Y denuncia que el Estado francés no respeta la Carta Europea de las Lenguas Regionales o Minoritarias, que es de obligado cumplimiento.

La Plataforma per la Llengua

La Plataforma per la Llengua lleva 11 años en su tarea de defensa del catalán. A pesar de defender la unidad del catalán, no tiene presencia en todo el territorio, sino que tan sólo tiene implantación en el Principat, en País Valencià y en el Alguer, pero está en contacto con organizaciones que defienden la lengua en otras partes de los Països Catalans, como la Obra Cultural Balear. En el manifiesto, la Plataforma no se ha querido limitar a reclamar los derechos lingüísticos de los habitantes de los Països Catalans, sino que han querido ir más lejos, y ha dejado bien claro que también se reclamaban derechos sociales, como el derecho a la vivienda, o el derecho a un trabajo digno.

La independencia

Òscar Escudé afirma que la defensa del catalán es un largo viaje, en el que se adelanta paso a paso. Pero ha insistido en que "En este momento el país tiene un reto, que es convertirse en un país independiente. Y eso será muy bueno para la lengua. Con eso el camino será mucho más fácil de recorrer". Ya que, asegura, lo mejor que le puede pasar al catalán es que "no se pongan trabas en nuestra lengua".