Las cafeteras de cápsulas nos han facilitado la vida de forma notable. Y también ha popularizado en gran medida el consumo de café expresso. Antes estaba reservado a los que optaban por una cafetera a presión con mango tradicional. Pero esas dan más trabajo que las de cápsulas, en las que solo tenemos que preocuparnos de tener alguna cápsula en la caja.
Estas cafeteras, además, han quitado mucho protagonismo a las cafeteras americanas, aquellas que en unos minutos preparan un litro de café, y que no faltan en ningún desayuno en las películas de Hollywood. No obstante, estas cafeteras siguen teniendo su público fiel.
Estas últimas están basadas en el método tradicional que usaban las primeras cafeteras. Todo empieza en el siglo XV, en Turquía. Entonces el café era usado como una infusión que se hervía en una jarra de metal.
Las primeras cafeteras datan de 1802
Un método que evolucionó en las primeras cafeteras propiamente dichas. Estas tienen origen en 1802 en Francia. Y fueron obra del farmacéutico Francois Antoine Descroisilles.
El invento consistió en dos recipientes unidos por una chapa que funcionaba a modo de colador. En uno había agua que se hervía, generando vapor que pasaba a través del filtro y del café, dando como resultado un café muy parecido al que producen las cafeteras americanas.
Lidl pondrá a la venta una cafetera de prensa francesa
Un método que puedes recuperar con la cafetera de prensa francesa de la marca Bodum que en los próximos días podrás encontrar a la venta en Lidl. La multinacional alemana añadirá a su catálogo este artilugio el próximo 20 de septiembre . Y lo hará a un precio de solo 14,99 euros.
Cafetera de prensa francesa Brazil de Bodum a la venta en Lidl
En todo caso debes tener en cuenta que solo está disponible a través de la página web de la multinacional alemana, con lo que tendrás que añadir 3,99 euros en concepto de gastos de envío.
Esta cafetera que encontrarás en Lidl está fabricada con vidrio de borosilicato resistente al calor. Permite preparar hasta un litro de café, que corresponde a unas 11 tazas. No necesita filtros de papel ni cápsulas de plástico. Y es muy fácil de limpiar y usar. Solo tendrás que sacar el émbolo de la jarra, agregar café molido, verter agua hirviendo y remover con la cuchara. A continuación colocamos el émbolo encima de la olla y cerramos la tapa para retener el calor. Tras unos cuatro minutos solo tendremos que retirar el émbolo y servir el café.