Según la OMS, "la actividad física en los niños es primordial, no sólo por el hecho de hacer ejercicio, sino porque puede contribuir al desarrollo social de los jóvenes, dándoles la oportunidad de expresarse fomentando la autoconfianza, la interacción social y la integración". La crisis del coronavirus y la pandemia del Covid-19, sin embargo, ha provocado que desde hace meses miles de niños y jóvenes en Catalunya no puedan practicar su deporte, ya que las medidas del PROCICAT castigan una vez tras otra al deporte en edad escolar. ¿Por qué?
Un partido de fútbol 7 en edad escolar. (Pixabay)
Esta es la pregunta que desde hace días se hacen todos los Consells Esportius de Catalunya, que por enésima vez han visto cómo el Govern de la Generalitat ha dejado de lado el deporte en edad escolar que realizan miles de niños, jóvenes y adolescentes en nuestro país. A partir de este agravio discriminatorio entre el deporte escolar y el deporte federado, los consejos deportivos de Catalunya se han dirigido por carta al secretario general de Salud, al secretario general de Deportes, la consellera de Salud, la consellera de Presidencia, y al Vicepresidente para reclamar una reanudación deportiva igual para los dos modelos deportivos del país.
El deporte escolar, el deporte necesario
En Catalunya hay un modelo deportivo dual basado en el deporte federado y el deporte no federado que realizan los consejos deportivos. ¿Qué son los consejos deportivos, sin embargo? Pues son los que garantizan el deporte en edad escolar, es decir, la actividad que permite el acceso a la práctica deportiva de miles de niños, jóvenes y adolescentes; sin embargo, también son los responsables del deporte popular que permite la continuidad deportiva de aquellos adultos que no son o no quieren ser federados. En Catalunya existen casi 300.000 participantes de este modelo deportivo en edad escolar, pero el PROCICAT sigue olvidándose de todos estos deportistas de los consejos deportivos, generando un agravio irreparable entre los deportistas escolares y los deportistas federados: a pesar de estar sujetos a los mismos acondicionados por la COVID-19, los primeros no pueden entrenar ni jugar mientras que los segundos, en cambio, sí.
Desde la Unió de Consells Esportius de Catalunya se muestran muy críticos con las medidas del PROCICAT y la desesperación en que los deportistas no federados viven la situación. "Les pedimos que pongan remedio y que sean justos. Que cuando se haga una excepción por el deporte federado, también se haga por los consejos deportivos y que no se nos siga dejando de lado". Son declaraciones de Jaume Domingo, presidente de la UCEC, que cree que "la situación actual implica que en cada resolución que se dicta se está condenando toda una parte del modelo deportivo del país a favor de la otra, dejando la actividad deportiva en edad escolar de los consejos deportivos tocada de muerte".
Un jugador de tenis en edad escolar. (Pixabay)
Las nuevas medidas, discriminatorias
Pronto hará un año que el deporte escolar se vio obligado a detenerse en seco. Si en los primeros meses el coronavirus dejó en suspense toda la actividad deportiva, fuera del tipo que fuera, poco a poco las restricciones sanitarias se han ido relajando, permitiendo primero el retorno a las competiciones de los equipos federados de ámbito nacional y ahora, también, el retorno a la actividad de los equipos federados de ámbito territorial. En cambio, sin embargo, en todo este tiempo el deporte escolar no ha podido dar ningún paso adelante para poder recuperar su actividad, por eso ve con desesperación cómo sus deportistas se tienen que resignar permanentemente a nuevos paros. ¿Qué se reclama desde los Consejos Deportivos de Catalunya? Básicamente, medidas iguales para los dos modelos deportivos.
Es decir, en primer término, que las excepciones a la práctica deportiva se hagan por todos aquellos deportistas que disponen de licencia federada y de los consejos deportivos. Después, que se deje de discriminar al sector de la actividad física y el deporte respecto del resto de sectores, y que las medidas que se tomen estén dotadas de equidad y coherencia. Y para acabar, que se establezcan las medidas compensatorias necesarias para asegurar la viabilidad del deporte sin ánimo de lucro, es decir, que se asegure que tanto la Unió de Consells Esportius de Catalunya, como los mismos consejos deportivos, recibirán por parte de la Generalitat como mínimo la misma dotación económica que la temporada anterior con independencia del volumen de actividad que finalmente se pueda acabar realizando con el fin de poder mantener las estructuras básicas de funcionamiento.
Pista de baloncesto de una escuela. (Pixabay)
Una reclamación a favor del sentido común
¿Qué diferencia hay entre un deportista de 9 años que juega en un equipo de baloncesto escolar y uno que juega en un equipo de baloncesto federado? A fin y efecto, ninguna, ya que los deportistas en edad escolar de los consejos deportivos disponen de licencias deportivas propias, entrenan en grupos burbuja, tienen sus propios protocolos de la COVID-19 y llevan a cabo la competición deportiva que les es propia. O sea, exactamente igual que los deportistas de las mismas edades que compiten federados. La misma situación se da con los deportistas de Esport Popular que disponen de licencia de actividad física de los consejos deportivos los cuales entrenan en grupos burbuja, tienen sus propios protocolos de la COVID-19 y llevan a cabo la competición deportiva que les es propia, en las mismas condiciones que los deportistas federados. Sin embargo, el PROCICAT establece que los deportistas federados pueden entrenar y los deportistas de los consejos deportivos no.
Además, en muchos clubs se dan situaciones absurdas como que, en un mismo club, deportistas de la misma edad pueden entrenar si participan en las competiciones federadas, y en cambio, no lo pueden hacer si participan en las competiciones de los consejos deportivos. Ante esta situación, los consejos deportivos afirman no haber cuestionado nunca las medidas sanitarias, pero evidentemente sí que cuestionan que estén actuando con ecuanimidad. "No sabemos por qué se nos castiga de esta manera ni por qué el PROCICAT nos condena", afirman. "Contamos con más 300.000 deportistas que estan sufriendo una discriminación en su práctica deportiva porque han escogido el modelo deportivo de los consejos y no el federado". Por encima de todo, los consejos deportivos sólo reclaman coherencia y sentido común a la hora de tomar medidas: está en juego el riesgo real que se liquiden más de 40 años de un modelo deportivo propio que puso en marcha el Parlamento de Catalunya en la primera Ley del Deporte de nuestro país.
Partido de voleibol de edad infantil. (Pixabay)