En marcha el derribo de los antiguos restaurantes del Moll de Gregal de Barcelona que cerraron después de Navidad en la que es la primera fase de la construcción de lo que se ha bautizado como Balcó Gastronòmic del Port Olímpic. Tal como ha detallado el Ajuntament en un comunicado, se están desmontando progresivamente los antiguos locales, para después suprimir también elementos como bloques de escaleras y las pérgolas de las terrazas de los restaurantes, unos elementos que hasta ahora eran característicos de la zona, pero que no tienen lugar en este nuevo proyecto. Otra de las novedades es un acceso que comunicará con la playa de la Nova Icària, cosa que desde el consistorio apuntan que podría ayudar a crear un "mayor diálogo" entre las actividades en el Port y el litoral de Barcelona.

Las tareas del derribo de los antiguos restaurantes se alargarán hasta mediados de verano. Una vez borrados del mapa barcelonés, empezarán las obras de construcción de los nuevos espacios de restauración, que están conformados por 11 restaurantes y 3 tiendas gastronómicas. Estos se colocarán en un "moderno y accesible paseo hasta cerca del Mediterráneo", según destaca el Ajuntament. Entre las obras de mejora también se ha tenido en cuenta la accesibilidad, incorporando ascensores y escaleras. Según las previsiones del consistorio, el Balcó Gastronòmic abrirá las puertas el verano del 2024, coincidiendo con la celebración de la Copa América de Vela, y ya hay un 80% de las propuestas adjudicadas, mientras se trabaja para completar el resto.

Las propuestas del nuevo Balcó Gastronòmic

Tal como se anunció en el mes de diciembre, pasadas las fiestas navideñas cerraron los seis restaurantes del Moll de Gregal que todavía estaban abiertos: la Fonda del Port Olímpic, La Barca de la Salamanca, Tocca Ristorante, La Taberna Gallega de Marcos, Empire y El Cangrejo Loco. Poco más de un mes después, a mediados de febrero, el Ajuntament dio a conocer este 80% del nuevo Port Olímpic que ya había sido adjudicado. Tal como aclararon, la selección de proyectos que formarán parte de esta nueva etapa se hizo por medio de un concurso público en qué se tuvieron en cuenta, entre otros criterios, la calidad y el estilo de cocina y producto, el diseño y ambientación propuestos para los espacios interiores de los locales y las medidas de sostenibilidad establecidas.

En total, se presentaron 15 propuestas, que fueron valoradas por un jurado formado por representantes del Ajuntament de Barcelona, B:SM, el Centro de Convenciones Internacional de Barcelona, el Gremio de Restauración de Barcelona y la Fundación Alícia, entre otros agentes vinculados al sector. Las nueve propuestas escogidas son las siguientes:

Cocinas del mundo – innovación: Grup Sagardi
Cocinas del mundo – innovación: Pantea Group
Gastronomía azul: El Cangrejo Loco
Cocina flexiteriana: Pantea Group
Cocina catalana: La Fonda del Port Olímpic
Cocina del Mediterráneo: La Barca de la Salamanca
Cocina del mar: La Taberna Gallega de Marcos
Aperitivo: Platillos
Menú diario: Los Huevos de Colón

Cuarenta millones en seis años

El desarrollo del nuevo modelo del Port Olímpic comportará una inversión total de más de 40 millones de euros, que se llevará a cabo durante los próximos 6 años sin detener la actividad cotidiana que se desarrolla y con la voluntad de devenir un espacio de referencia en la vida ciudadana, con la náutica popular, el deporte y la divulgación como actividades centrales y con nuevos espacios vinculados a la promoción económica y de fomento a la economía azul. Uno de los propósitos fundamentales es hacer que el Puerto se integre con la ciudad, haciéndolo más accesible, más amable y con más zonas para el encuentro ciudadano y los usos sociales y cotidianos de la ciudad y especialmente del distrito de Sant Martí.