Llega ya el verano y no hay nada más atractivo que disfrutar de las vacaciones en la playa o en la montaña. El intenso calor, la humedad e, incluso, la contaminación ambiental drenan el brillo natural y hacen que tu piel se vuelva opaca, grasosa y dañada.

La actividad de las glándulas sebáceas aumenta a medida que aumentan la temperatura y el calor durante el mes de verano. La humedad hace que la piel grasa lo sea más aún y la piel seca se vuelve más áspera y escamosa. El sol emite rayos UV que producen pigmentos de melanina. Demasiada melanina da como resultado una piel oscura y bronceada. El calor puede causar más poros abiertos que pueden obstruirse con grasa, suciedad y bacterias. Esto puede causar marcas de acné, arrugas, envejecimiento de la piel e hiperpigmentación.

En este artículo, te vamos a ofrecer unos consejos sobre cómo cuidar tu piel en verano.

  • Mantente hidratado

Para una piel saludable y brillante, mantente hidratado por dentro y por fuera. Beber mucha agua ayuda a tu cuerpo a eliminar todas las toxinas de la sangre y el sistema digestivo. Esto también ayuda a prevenir la picazón, el acné y otras afecciones de la piel. Bebe tres litros de agua al día y evita las bebidas deshidratantes como el alcohol. Puedes beber zumo de frutas frescas y agua de coco, que ayudan a nutrir su piel.

  • Limpia y Exfolia

La limpieza facial es un régimen básico de cuidado de la piel. Debes limpiar tu rostro al menos dos veces al día. Eliminará todas las impurezas, el polvo y la contaminación que se adhieran a su rostro.

La exfoliación aumenta la circulación sanguínea y elimina las células muertas de la piel de la capa externa. Mejora el aspecto de la piel eliminando la piel seca. Puedes usar el exfoliante facial de 4 a 5 veces por semana para obtener un aspecto vibrante y más brillante.

  • Tónico facial

Los tónicos están formulados para eliminar las células muertas de la piel, limpiar los poros en profundidad y refinar los poros dilatados de la piel haciéndolos menos prominentes. Así que usa siempre tónico facial después de limpiarte la cara.

  • Hidrata bien tu piel

Los veranos son muy húmedos, pero aun así, tu piel necesita una hidratación adecuada. Puedes usar humectantes, aceites esenciales y suero. Reducen la inflamación, reparan e hidratan la piel. La crema hidratante protege la piel del polvo y los productos químicos que pueden dañarla. El humectante bloquea el agua y el aceite natural en la piel brinda hidratación adicional a la cara.

Mujer poniéndose crema hidratante
Mujer poniéndose crema hidratante / Unsplash
  • Usa protección solar

La exposición prolongada al sol puede causar arrugas, hiperpigmentación, quemaduras solares y envejecimiento de la piel. El protector solar actúa como un escudo contra los peligrosos rayos UV. Utiliza siempre protector solar cada vez que salgas y elige uno adecuado para ti.

  • Remedios caseros

No olvides lo que te decía la abuela. Hay muchos ingredientes en tu cocina que pueden hacer que tu piel esté saludable en verano. Así, los tomates y los limones pueden refrescar tu piel. El licopeno en los tomates previene la decoloración de la piel, las líneas finas y las arrugas. Muele tomate, haz zumo sin añadir agua y congela este zumo en cubiteras. Después frota tu rostro con estos cubos.

El aloe vera es el mejor remedio para la piel, actúa como humectante e hidrata la piel. Ayuda a tratar las espinillas, el acné y las cicatrices. La pasta de miel y aloe vera es la mejor para pieles grasas.

  • Come sano

Tu piel es el resultado de lo que comes. Si quieres una piel saludable y brillante en los veranos, come alimentos que nutran tu piel. Evite los alimentos pesados ​​y ricos en carbohidratos, que pueden engrasar la piel. Come verduras y frutas ricas en proteínas, antioxidantes y vitamina C.