España es aquel país donde los hiperventilados se rasgan las vestiduras básicamente por una cuestión: Catalunya. O más bien, por la independencia de Catalunya. Es hablarle del procés y saldrán de debajo de las piedras una multitud de defensores de la patria envueltos en la rojigualda llenándose la boca de soflamas sobre la unidad del país, sobre que los indepes, caca, y bla, bla, bla.
España es aquel país donde, especialmente su clase política, la más derechosa, por descontado, pero tampoco se esconden los partidos llamados de izquierdas, y donde los votantes de estos partidos políticos siguen a pies juntillas lo que hacen sus líderes, especialmente, callar como las ratas, poner la basura bajo la alfombra y mirar hacia otra parte cuando se trata de escándalos relacionados con la Casa Real. ¿Salen novedades indignas sobre los chanchullos de Juancar? Todos calladitos, la inviolabilidad del rey y monsergas de este tipo, y ni rastro en las portadas.
Juan Carlos / Efe
España es aquel país donde una enorme parte de la ciudadanía más reaccionaria salta a la mínima que hay una manifestación defendiendo los derechos de las mujeres, del colectivo LGTBI o de otra causa por el estilo.
Y España es aquel país que cuando hay un hecho que tendría que hacer que saliera todo el mundo a la calle indignada, protestando y alzando la voz y diciendo que Ya basta, no pasa. Todo el mundo calladitos. Sí, sí, con la boca pequeña ir diciendo que no puede ser y poniéndose las manos en la cabeza, pero cuando se trata de hacer una movilización masiva para parar una barbaridad, todos tapaditos. Y Toni Clapés ya no se ha mordido más la lengua.
Toni Clapés, hartón / TV3
El locutor de RAC1 clama al cielo ante lo que está siendo una auténtica vergüenza. Y lo que es peor: una vergüenza que cada día se supera a ella misma, el precio de la luz. ¿Un día la luz llega a su máximo de cara? Tranquilos, que al día siguiente tendrá un precio un poco más desorbitante.
Y ahora, para acabarlo de arreglar, las eléctricas amenazan con cerrar sus centrales nucleares después del plan del gobierno para abaratar la luz... Como diría aquel... Manda cojones. De traca. Y Clapés no ha podido más y ha dicho bien alto lo que le ha pasado por la cabeza. Mensaje dirigido a las eléctricas, pero sobre todo, a este país denominado España que no mueve un dedo si no se trata de Catalunya: "La soberbia de los que no tienen quién les pare. España, despierta!!! Que no solo se vive de movilizarse contra Catalunya!!!.
Una verdad como un templo. Un Clapés que emplaza a la ciudadanía a hacer lo que haría falta, movilizarse contra una situación que es sencillamente indignante. Una situación que viene de lejos, tal como el mismo Clapés ha retuiteado:
Seguro que si a la noticia pusiéramos "el procés de las eléctricas de amenazar con cerrar sus centrales nucleares", en las españas estarían todos en la calle con pancartas y a punto de prender fuego.