Esperamos que los magistrados españoles hayan pedido a los Reyes Magos muchas provisiones de cremas hidratantes para las mejillas, porque los sopapos que están recibiendo los Marchena, Llarena y compañía van que vuelan. La justicia europea vuelve a dar una sonora bofetada a los jueces españoles. Ahora ha sido el juez de instrucción belga quien ha decidido dejar en suspenso el proceso de extradición del president Carles Puigdemont y del conseller Toni Comín, porque tienen inmunidad al haber sido escogidos miembros del Parlamento Europeo en las últimas elecciones, tal como dictaminó el TJUE.

Comín Puigdemont eurodiputados Marta Lasalas

Marta Lasalas

Tercer intento de la justicia española, que de momento queda parado. Tercera vez que el juez Llarena recibe un portazo en los morros. Un nuevo revés a los jueces españoles cuando sólo hace dos días que hemos empezado este 2020. El unionismo supura bilis en cantidades industriales. Los defensores de la justicia y la patria española se están quedando más solos que la una.

juez pablo llarena ACN

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Llarena, de momento, calla. Toni Soler, no. Y el guantazo que le dedica al juez Llarena es de los que resuenan. Tres sencillas palabras, en mayúsculas y en inglés, para que el juez vaya practicando lenguas, cosa que necesitan los soberbios jueces españoles: "IN YOUR FACE, Llarena":

Si alguien se cruza hoy con el juez Llarena, fíjese bien: seguro que le ven en la cara las marcas del tortazo con la mano extendida que le ha propinado la justicia europea.