Sin descanso ni piedad. Van a saco, que dirían los castellanos. El catalán es el gran trofeo de caza mayor del españolismo, porque destruyendo el idioma aplastan también la identidad, la cultura, el país. Catalunya, vaya. La guerra, o mejor dicho, la invasión lingüística salvaje y violenta, está haciendo estragos. No es nueva, ni mucho menos: llevan siglos practicándola, atacando, despreciando, prohibiendo... Pero en pleno siglo XXI, con el gobierno más progresista de la historia mandando en la Moncloa con el apoyo parlamentario de un partido independentista como Esquerra Republicana, la virulencia es todavía más cruel y más mortífera. El catalán no es que esté en la UCI, es que algunos ya le han comprado el ataúd, los clavos y la lápida. Aunque no haría falta, porque con lanzarlo al mar el españolismo ya estaría satisfecho.

La situación es grave, gravísima. También intolerable y que nos tendría que hacer reaccionar de forma urgente, vehemente y sin medias tintas. Precisamente lo que hace la escritora Pilar Rahola, estremecida e indignada con cada nuevo atropello dirigido desde Madrid. Y son muchos, prácticamente diarios. Una gota malaya que analiza en un nuevo vídeo de 'Paraula de Rahola', a raíz de dos movimientos muy esclarecedores del modus operandi del estado español: el de la Comisión de Exteriores del Senado, votando en contra de la utilización del catalán, el euskera o el gallego en el Parlamento europeo; y el del Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, "haciendo suyas las tesis de los sectores ultras contra el catalán en la escuela". En definitva, "por tierra, mar y aire. Es un estado que utiliza todos los estamentos para ir debilitando y estropeando la salud del idioma catalán".

Ricardo Rubio / Europa Press presidenta comision europea ursula von der leyen presidente gobierno pedro sancehz
Ursula Von Der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, y Pedro Sánchez, presidente del Gobierno / Europa Press

Pilar habla muy claro: "Si no nos damos cuenta es que no queremos verlo. La ofensiva es permanente". Destaca como el PSOE, "el mismo que se sienta en aquella mesa de diálogo auténticamente falsa, en la cual dijo que "impulsaría el uso del catalán en Europa", nos ha vuelto a mentir. "Son unos miserables. Estamos hablando de un patrimonio lingüístico de 1000 años de historia, perseguido durante décadas, siglos. Y que el estado que lo tendría que defender sigue agrediéndolo. Lo repito, están haciendo una limpieza lingüística, utilizando todos los mecanismos que tienen para destruirnos. Saben lo que hacen". En cuanto a Gabilondo, tampoco escatima en vehemencia: "¡Qué se ha creído el defensor del pueblo, si este es un instrumento que ni siquiera lo tenían! ¡Lo copiaron de la Sindicatura de Greuges catalana, que es secular, antiquísima! ¿Y ahora viene a meternos el dedo en el ojo a lo que hacemos los catalanes, y a las decisiones del Parlamento y del Gobierno? ¿Pero qué se han creído?". El catalán "expulsado, acosado en los juzgados, despreciado permanentemente por los medios de comunicación. Destruido por leyes y por acciones. Atacado por instituciones españolas de todo tipo. Vulneran completamente los derechos lingüísticos de las minorías, ¡digámoslo claro!". Y lo que es peor: en Catalunya, "donde tendríamos que poder gobernar un poco la salud de nuestro idioma, tampoco podemos hacerlo porque estamos atados de pies y manos".

El Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo Europa Press
Ángel Gabilondo, Defensor del Pueblo español / Europa Press

Rahola se hace eco del editorial de José Antich en El Nacional.cat, "un artículo demoledor que daba datos como que en ningún distrito de Barcelona el catalán es la lengua de uso entre los jóvenes . ¡En ninguno! ¡Cero! ¡De los 10 distritos ni uno! El distrito donde más lo utilizan es Sarrià-Sant Gervasi, que llega al 44%. En Nou Barris el 5%... ¡Pero lo más aterrador es que en 2015 estaba en unas cifras mucho más elevadas! ¡En pocos años ha retrocedido el uso en 7'2 puntos! ¡Es una barbaridad que nos sitúa en una posición de no retorno! El catalán está en peligro real, metámonoslo en la cabeza".

(Alta) Manifestación escuela en catalán, Via Laietana hasta Parlamento cabecera, pancarta Joan Mateu Parra
Manifestación en defensa de la escuela en catalán / Foto: Joan Mateu Parra

Posiblemente, pues, la peor situación de la historia, y mira que las hemos pasado canutas: "Al principio del siglo XIX, Bonaventura Carles Aribau prácticamente se despedía del catalán porque lo habían expulsado de todas partes. Pero renacimos. Y en pleno franquismo, durante 40 años, prohibido, machacado, perseguido. Pero resistimos". La pregunta es si resistiremos este embate. Las condiciones son diferentes, complicadas. "Tenemos grandes olas migratorias, pero sin capacidad de Estado. Y como el catalán deja de ser necesario porque no es obligatorio, pues es muy difícil que estos sectores que llegan se puedan normalizar lingüísticamente. Y después tenemos la irrupción brutal de los medios audiovisuales. Con herramientas de Estado se puede mantener la salud de un idioma. Sin ellas es muy difícil. ¡Pero con un estado a la contra es imposible!".

 

La sentencia de Rahola da miedo y mucha tristeza: "Es posible que estemos en mayor peligro que bajo el franquismo. Más que bajo Fernando VII o Felipe V. Es posible que estemos en el momento de más peligro del uso del catalán". Toca movernos. "Tenemos que empezar a reaccionar. Nos han declarado la guerra".