Los problemas judiciales siguen bien de cerca a Patricia Conde. Los quebraderos de cabeza no cesan y parece que su divorcio la tiene todavía martirizada. Hace cuatro años que emitieron un comunicado asegurando que ponían fin a su matrimonio de manera amistosa, pero parece que de buen rollo no hay nada.
El empresario mallorquín Carlos Seguí concedió una entrevista a Vanity Fair asegurando que estaba viviendo una pesadilla por culpa de la presentadora: "Me acusó de maltrato psicológico, una estrategia procesal para quedarse con mi niño. Me parece inmoral". Era diciembre cuando decía que tenía que tener una relación "cordial" con ella por el bien del niño, pero lejos han quedado estas palabras.
GTRES
¿Por qué? Al salir a la luz que la fiscalía ha pedido dos años y siete meses de prisión para Conde. El marido la denunció por un delito continuado de descubrimiento y revelación de secretos, sosteniendo que extrajo del ordenador familiar unos correos privados de Carlos cuando ya no estaban juntos: unos mensajes que contenían su agenda personal, informaciones que había filtrado a periodistas o detalles de despedidas de soltero a las que había acudido, según explica LOC.
El Ministerio Público ve que utilizar estos correos, que había adquirido sin consentimiento, es un delito. Ella lo denunció por maltrato teniéndolos como prueba, un gesto que habría sido contraproducente y que han provocado que pidan pena de cárcel para ella.
El abogado de Carlos Seguí pide que la condena se eleve a cuatro años y que se sume una indemnización cuantificada en 20.000 € en concepto de daños morales.
Es destacable que el juez ha sentenciado a favor del mallorquín en todas las ocasiones anteriores, diciendo que las denuncias por maltratos no tenían cimientos y haciendo la batalla por la custodia del niño interminable... ¿Qué pasará al final? ¿Veremos a Patricia Conde dejando la televisión al tener que ingresar en prisión?