Nunca hubiera dicho la ex presidenta del Parlament Núria de Gispert que la compararían con Dulceida. A la instagramer le cayeron chuzos de punta cuando en un viaje reciente a África con su pareja, publicó fotografías y comentarios donde se veían niños africanos con unas gafas de sol que ella les regaló. La tildaron de frívola para arriba.

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@dulceida

La misma suerte ha corrido ahora la política y abogada. Frívola, infantiloide, Dulceida, lamentable... Son algunos de los adjetivos que ha recibido De Gispert después de su último tuit. La primera mujer en ocupar el máximo cargo en el Parlament catalán lo escribió con toda la buena fe del mundo, pero sus palabras -e imágenes- se le han girado en contra.

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Sergi Alcázar

De Gispert ha estado en Estremera y Soto del Real, donde ha visitado a Oriol Junqueras, Quim Forn, Raúl Romeva, Jordi Turull y Josep Rull. No le han criticado la visita. Sino lo que hizo después de verlos: publicar un mensaje en su cuenta de Twitter que muchos han tildado de frívolo.

La fotografía donde se la ve sonriente y las descripciones de Junqueras y Forn -"super delgados y guapos y con cuello"- o de Turull y Rull - "como dos niños" -, pretendían dar un mensaje positivo a sus amigos y familiares sobre el estado optimista de los encarcelados a pesar de estar privados de libertad desde hace meses. Pero ya se sabe que Twitter lo carga el diablo. Y a De Gispert le han ido a la yugular por su análisis en los 280 caracteres del mensaje. Muchos se han ensañado. Y muchos han salido en su defensa:

Algunos usuarios también le recriminan a De Gispert que no vaya también a ver a Carme Forcadell y Dolors Bassà en la prisión de Alcalá-Meco. Si finalmente acaba yendo, seguro que cuenta hasta 100 antes de escribir su tuit.