Es probablemente el momento más fuerte de las dos temporadas de La isla de las tentaciones, y difícilmente habrá otro tan impactante en la tercera entrega del reality. Telecinco ha pasado semanas mostrando adelantos de las imágenes del gran drama de Melyssa Pinto, y las ha utilizado como gancho cada vez que se anunciaba el programa. Y finalmente ha llegado el día de ver la secuencia entera. Este domingo, la concursante catalana ha sido testigo de la infidelidad de su novio, Tom Brusse, y ha acabado de rodillas por el suelo implorando a Sandra Barneda que no le mostrara nada más y que le dejara irse.

Melyssa Sandra

Melyssa, destrozada con la infidelidad de su novio, Tom Brusse | Mediaset

Besos y caricias entre en Tom y otra catalana, Sandra. Todo grabado en vídeo para que lo pueda ver la pareja de él y también toda la audiencia. Unos cuernos que se han gestado episodio tras episodio y que el joven excusa porque Melyssa es muy celosa. Pero nada justifica la humillación a su novia, y si quería dejarla habría sido mejor hacerlo en privado y no permitir que lo filmasen manteniendo relaciones sexuales con otra. Porque sí, Tomo y Sandra acabaron en la cama manteniendo aunque Melyssa estaba tan devastada que no lo llegó a ver, y el programa decidió cortar las imágenes después de que la concursante observase cómo se besaban y se echara a llorar en el suelo. "Sandra, por favor, déjame irme. Por favor te lo pido", repetía desconsolada. Finalmente encontró el apoyo de una de sus compañeras, Melodie, que intentó levantarle los ánimos con un discurso viral en las redes sociales, digno de la amiga que te hace abrir los ojos cuando tienes un desengaño amoroso: "No te puedes hundir por un mierda así. Menos mal que has venido aquí. Que si le mirabas el móbil, que si no le dejabas ser él... lo que quería era ser un cerdo, que es lo que está haciendo. Y encima tú machacándote con los celos".

Todo esto, sólo una semana después de la polémica con la actriz Elisa Mouliaá sobre si las tramas son reales o es todo una mentira. Puede ser que haya partes del programa guionizadas para intentar atrapar a los espectadores, pero cuesta creer que la secuencia traumática de esta noche cuente con la complicidad de Melyssa. Sólo hay que haberlo visto para darse cuenta de ello.