Los concursos de belleza viven una realidad paralela a la razón de ser que en teoría tienen. Los certámenes donde se pasean mujeres de todo el mundo en bikini, con una banda cruzada, ante un jurado, no pueden ser más tronados y anacrónicos. Pero todavía se hacen. Pero al tiempo que se exhiben para que un grupo reducido de personas determine si son merecedoras de ser las más guapas o no, de saber quién se lleva el premio a Miss Simpatía, Miss Sonrisa Perfecta, Miss Fotogenia o Miss Cualquier Chorrada Que Nos Venga A la Cabeza, hay un interés enfermizo en saber lo inteligentes que son y qué cultura tienen. El paradigma de eso lo encontramos en un Miss España de hace unos cuantos años, cuando una esforzada Miss Melilla intentaba responder sin demasiado éxito ante la pregunta que le hizo un miembro ruso del jurado: "¿Qué sabes de mi país?".
"Un país donde vive gente maravillosa, que ha habido en el tema de política algunos cambios". Es extraño que las agencias de viajes no pusieran esta frase como reclamo bajo una foto del Kremlin o del museo del Hermitage de San Petersburg. Ahora, quien ha tenido que hacer de concursante de Pasapalabra a la hora que desfilaba en un concurso de belleza ha sido la pareja de Kiko Matamoros, Marta López.
@martalopezalamo
Este domingo ha estado a punto de ganar el certamen de Miss World Spain 2019. La participante de Jaen quedó a las puertas. A López, como al resto, le hicieron una de aquellas preguntas marca de la casa: "Si pudiera encontrar una cura para una enfermedad, ¿cuál sería?". La tensión del momento hizo que no pensara en ninguna enfermedad de las que desgraciadamente se llevan muchas vidas cada día, y en cambio, optó por una respuesta más extraña que descolocó al jurado: "Si tuviera que elegir una enfermedad sería el mal. Que es una enfermedad que está presente a lo largo de la historia".
@chance
“Si el ser humano no tiene la capacidad de expresar su bondad como quisiera… Es la parte negativa de la sociedad”, continuó la Miss. "El mal es la enfermedad que el progreso trae y está en nuestras manos curar esa maldad con la bondad”. No se le puede negar originalidad a la concursante. Pero no le auguramos mucho futuro en Telecinco teniendo esta filosofía de vida. No le sirvió, sin embargo, para ganar, ya que el galardón se lo llevó otra andaluza, María del Mar Aguilera, Miss World Córdoba.