La modelo Laura Sánchez le ha declarado la guerra a su exmarido, el futbolista Aitor Ocio. Una guerra que tiene lugar en las redes sociales, obligándole a eliminar todas las imágenes de Naia, la hija que tienen en común. La joven de 13 años ha sido motivo de vomitivos ataques en Internet, cuando se hizo público que se siente un chico. Y ahora la polémica vuelve a salpicar su vida, con la prohibición de la madre de compartir cualquier imagen en la cuenta del vasco. Aitor ha emitido un comunicado lamentado la decisión de su ex.
@laurasanchezofi
La relación entre el antiguo matrimonio, divorciados en 2011 después de 6 años de relación ha estado plagada de disputas por la falta de entendimiento entre los dos adultos. Y este último episodio pone de manifiesto que no hay marcha atrás. Ocio, que tiene la custodia, asegura que ambos están desolados, ya que todas las imágenes compartidas por el exfutbolista del Athletic Club y Sevilla fueron consensuadas:"Era algo que tanto a Naia como a mí nos hacía mucha ilusión; sobre todo, sabiendo, tal y como me habéis contado muchos de vosotros en este tiempo, que estas imágenes os servían de ejemplo, motivación e inspiración".
Esta imagen aparece en la cuenta de Instagram del futbolista Aitor Ocio. Quien le coge de la mano es su hija...¿os podéis creer que entre los comentarios no han faltado las críticas a que una chica lleve un bañador de chico? Demencial. Desde hoy, Aitor Ocio tiene mi admiración. pic.twitter.com/7SAxHQpxTv
— Juan Luis Tena (@juanluistena) 26 de julio de 2018
"Me cuesta comprender como en pleno siglo XXI, resulta ser que un padre con la guarda y custodia única no puede compartir en su cuenta personal el enorgullezco, amor y admiración que siente por su hija", continúa Aitor, que lanza preguntas al aire: "¿A quién hacíamos daño?, ¿a quién perjudicábamos?,¿eliminar a una hija del Instagram de su padre es protegerla?". Ocio ha recibido el apoyo de sus seguidores, sorprendidos con la drástica medida (aunque también hay quien le ha criticado)
@aitor20oci
Aitor finaliza el mensaje con esperanza y resignación: "Nos han borrado nuestras fotos pero jamás nadie podrá borrar nuestras sonrisas"