Fue una de las grande estrellas del pop de finales de los 90 y la década del 2000, saltando a la fama con una canción que todavía tarareamos de vez en cuando: Baby one more time. Un hitazo que enloqueció el panorama musical, coronando a una nueva reina del género: Britney Spears. La norteamericana disfrutó del éxito y la fama internacional, aunque su carrera a menudo se ha tambaleado debido a sus problemas personales, también llamados adicciones con el alcohol y otras sustancias. De hecho, hace tiempo que no es más que el recuerdo de lo que podía haber sido, a pesar de sus intentos por revivir aquella época. Lo que no ha cambiado, sin embargo, es la excentricidad de la artista, siempre pintoresca, exagerada y muchas veces, absurda. Y estos días, parafraseando otra de sus canciones de referencia, lo ha vuelto a hacer. Oops, I did it again. El ridículo, claro está.

Britney spears rocía @britneyspears

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Britney ha querido "celebrar" los 19 años de su irrupción enlas listas de éxitos con una fotografía en Instagram en la que recordaba su primer hit y, especialmente, el look que la convirtió en un icono planetario: Un uniforme escolar bastante cortito, protagonista de los sueños húmedos de miles de chicos y chicas de todo el mundo. El problema ha sido, sin embargo, que como al resto de los mortales el tiempo le ha pasado factura, y su cuerpo ya no es el que era. Un problema para el que Britney creía tener la solución: Un par de "pasaditas" de photoshop y hale, a triunfar. Como cantante, tendrá talento, pero como diseñadora gráfica no tiene precio. El resultado de esta "lipoescultura" digital es para patirse. Atención a las cajoneras que tiene a su lado.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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Britney spears detalle photoshop @britneyspears

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Los fans se lo han pasado en grande examinando esta fotografía y disfrutando de su peculiar percepción de un trabajo bien hecho... y del ridículo. Pero la manía de Spears tiene una motivación, y es que hace semanas comenzó una cruzada contra los paparazzis que la persiguen, a los que acusa de retocar sus fotografías para hacerle parecer más gorda de lo que es. Juzguen ustedes mismos.

Pasan los años y las generaciones, pero una cosa sí que le tenemos que reconocer: Es única dando la nota.