Isabel Pantoja no pasa por un buen momento. Desde que entró en prisión su vida ha sido un completo infierno, una pesadilla de la que le gustaría despertarse. La cantante se encuentra sumida en una profunda tristeza tras quedarse completamente sola, aislada en Cantora. El año pasado se enfrentó a su hijo Kiko Rivera, una traición que pensó que nunca llegaría. También tuvo que despedirse de su madre, Doña Ana, su pilar más importante. Y ahora espera la resolución de un nuevo juicio. Podría ir a prisión tres años más.

Cantora EFE

Cantora / EFE 

La cantante ha dicho un hasta aquí. Isabel Pantoja tiene serios planes de poner a la venta Cantora y venderla al que mejor pague. Quiere irse lejos y olvidarse de todo. "Está en una situación desesperada. Tras la muerte de su madre no quiere estar más tiempo allí. Quiere vender e irse, pero tiene que hablar con los abogados de Kiko Rivera (...) Se va de Cantora, ya lo tiene decidido", ha desvelado este miércoles Antonio Rossi en El programa de Ana Rosa.

Nueva batalla con Kiko Rivera por Cantora 

Casi la mitad de la finca le corresponde a Kiko Rivera, aunque éste no le pondría ninguna pega ya que su intención también es venderla. La intención de Isabel Pantoja es vivir en Madrid, aunque no se descarta otra ubicación de su querida Andalucía. Cristina Tárrega, por su parte, ha asegurado que "su intención es vivir a las afueras de Madrid", aunque antes no descarta instalarse en su casa de El Rocío, en la provincia de Huelva, un sitio que la acercaría más a Dios. 

Isabel Pantoja EFE

Isabel Pantoja / EFE 

Isabel Pantoja no se irá sola, continuará ligada a su hermano Agustín, su mayor apoyo en estos tiempos tan difíciles, aunque para algunos sea su peor enemigo. Tal y como cuentan los colaboradores de Telecinco, si finalmente la venta no se hace efectiva o tarda más de lo esperado, la cantante abandonará Cantora sí o sí muy pronto. No quiere seguir viviendo allí ya que le trae muchos recuerdos de su madre y además le ha traído muchas desgracias. Incluso podría estar maldita. “Abandonará la finca de igual manera”, dicen.