Carlos III ha sido proclamado como el nuevo soberano del Reino Unido tras el fallecimiento de su madre, Isabel II, a los 96 años. Sin embargo, a pesar de que él indicó en su primer discurso oficial como rey que está “profundamente consciente de los deberes y responsabilidades” que debe cumplir al haber ascendido al trono, lo cierto es que el pueblo británico y la prensa local han puesto principal atención a su estado de salud, dado que la evidente hinchazón en sus manos podría revelar que estaría padeciendo de una grave enfermedad.  

Recientemente, el rey Carlos III ha asistido a una serie de eventos públicos que forman parte del protocolo real para la formalización de su ascenso al trono tras la muerte de la reina. Sin embargo, además de sus constantes problemas para poder firmar con una pluma estilográfica, lo que más ha llamado la atención han sido sus manos enrojecidas e hinchadas; una imagen que los británicos han relacionado con la apariencia de la mano derecha de Isabel II durante la visita de la primera ministra Liz Truss a Balmoral, dos días antes de su muerte, puesto que en ese momento la monarca tenía un gran hematoma negro en su mano, por lo que las manos hinchadas de Carlos III se ha convertido en un mal presagio.

Según los especialistas, el recién nombrado rey de Inglaterra padece de un edema que afecta directamente sus extremidades debido a la retención de líquidos en el organismo. De acuerdo con el Dr. Gareth Nye, “El edema es una afección en la que el cuerpo empieza a retener líquidos en las extremidades, normalmente las piernas y los tobillos, pero también en los dedos, lo que hace que se hinchen”. Asimismo, indicó que el monarca podría estar sufriendo de artritis, una enfermedad que “suele afectar a tres zonas principales de la mano: la articulación del pulgar o cualquiera de las articulaciones de los dedos que suelen ponerse rígidos e hinchados y causan dolor. Aunque la medicación puede aliviar el dolor, la hinchazón puede permanecer”.

No obstante, el Dr. Alejandro Macías indicó que esta inflamación constante en las manos podría ser una de las consecuencias de una enfermedad mucho más grave como la insuficiencia cardiaca, renal o hepática, enfermedades que podrían poner en riesgo la vida del rey.

El rey Carlos III se ríe de su enfermedad al indicar que él tiene ‘dedos de salchicha’

Aunque en los últimos días las manos del monarca británico han llamado la atención de todos los medios, tanto locales como internacionales, lo cierto es que esta no es la primera vez que el rey aparece públicamente con las manos hinchadas. De hecho, el propio Carlos III ha bromeado con su condición al afirmar que él tiene “dedos de salchicha”, según indicó Howard Hodgson en la biografía “Charles, The Man Who Will Be King”.

“No puedo expresar lo emocionado y orgulloso que estoy. Realmente se ve sorprendentemente apetitoso y tiene dedos de salchicha justo como el mío”, indicó el rey en una carta que envió a un amigo tras el nacimiento de su primogénito, el príncipe Guillermo.