Kiko Matamoros no se calla nunca. No le importa lo más mínimo las consecuencias que puedan tener sus palabras. Es el colaborador más temido y duro de la televisión, por eso se le demanda en todos los programas. Sabe perfectamente como dar contenido y hacer crecer la audiencia, aunque a veces se pase de la raya, pero solo cuando quiere. Matamoros ha demostrado ser duro con quién quiere. Estos últimos años han sido especialmente difíciles para él por varios problemas de salud, algunos incluso con los que ha llegado a temer por su vida. Por ese motivo, cuando se trata de hablar de enfermedades, el padre de Laura Matamoros se muestra muy cauto y reservado. Mucho más si ésta toca muy de cerca a alguien conocido o de la familia.
Kiko Matamoros
Es el caso de Carla Barber, ex de hijo Diego Matamoros y una de sus médicas de estética favoritas. La canaria ha dado un paso al frente y ha hablado con decisión sobre uno de sus problemas de salud. A principios de septiembre, Carla Barber confesó a sus seguidores en redes sociales que se estaba sometiendo a unas pruebas del corazón, pero en ese momento aún no creía apropiado hablar del tema.
Carla Barber se sincera sobre su enfermedad
Este fin de semana, la exnovia de Diego Matamoros ha publicado un vídeo en el que, finalmente, explica todo lo ocurrido. "Hace justo un mes que me dieron la noticia de que tenía una enfermedad del corazón. No os había dicho nada todavía porque estaba esperando a tomar una decisión con respecto a qué hacer", comienza en el clip que ha compartido en Instagram.
Carla Barber
La ex concursante de 'Supervivientes' ha desvelado entonces de qué enfermedad se trata. "Tengo una enfermedad que se llama Síndrome de Brugada (...). Da lugar a arrítmias y produce muerte súbita", explicaba Barber en el vídeo antes de dar las gracias al equipo médico que la ha acompañado estas semanas.
La médica reconoce que no ha sido fácil. "Ha sido un poco un 'shock' que te digan que de pronto tienes un 3% de probabilidad al año de morir de muerte súbita en los próximos diez años. Es una enfermedad que no tiene tratamiento, no tiene cura. Lo único que realmente se puede hacer es poner un desfibrilador", explicaba en el vídeo.
Diego Matamoros con Carla Barber
Carla Barber anuncia que se podría someter a una cirugía que habría que repetir cada 10 o 15 años. "Habiéndolo sopesado mucho no me la voy a realizar. Hemos comprado desfibriladores para mis casas, mis clínicas y para llevar en el bolso en caso de viajes largos", ha desvelado.
Además, ha anunciado que procederán a hacer un centro médico cardioprotegido. "Una vez te detectan una enfermedad de este tipo te das cuenta de que mucha gente padece problemas cardiológicos", reflexiona Barber en el vídeo.
No obstante, se muestra optimista. ”Yo estoy muy bien, muy positiva. No pienso que tenga un 3% de probabilidades de que me pase, sino un 97% de que no me pase", ha asegurado.