Las fotografías oficiales de las Casas Reales para la celebración de la Navidad suelen estar cargadas de glamour, clase y elegancia. Sin embargo, la princesa Charlene de Mónaco y el príncipe Alberto quisieron hacer una excepción (por lo menos una vez) al posar con una vestimenta casual. Sin embargo, a pesar de las divertidas fotos del soberano monegasco posando con un par de Crocs y unas gafas muy festivas, lo que llamó especialmente la atención fue la apariencia de Charlene, quien posó sin una gota de maquillaje junto a su familia, mostrándoles a todos lo distinta que se ve a cara lavada.
Para esta divertida e inesperada sesión de fotos familiar, la ex nadadora olímpica lucía su irreverente estilismo con un rapado lateral y un peinado hacía atrás, un jersey de lana en degradé y un pantalón negro. Además, no había nada de maquillaje en su cara, así que se podían observar sus rasgos naturales. Cejas delgadas, ojeras pronunciadas y líneas de expresión alrededor del contorno de los ojos fueron algunos de los detalles que más llamaron la atención con relación a su cara, aunque hay que destacar que gran parte de su rostro estaba cubierto con la cara de su mascota, un perro chihuahua de color marrón que Charlene besaba con mucha ternura.
Junto a Charlene también aparecen el príncipe Alberto, su hija Gabriella, la princesa Estefanía, Camille Gottlieb, Pauline y Louis Ducruet y la esposa de Louis, Marie Chevallier. No obstante, a pesar de la intención de los Grimaldi de mostrarse como una familia ‘normal’, lo cierto es que no fue muy bien visto por algunos de sus seguidores, quienes incluso llegaron a afirmar que la imagen “descuidada” de Charlene eran una representación de todos los problemas de salud mental a los que la princesa se ha enfrentado en los últimos años
Charlene y Alberto de Mónaco renuevan su postal de Navidad
Hace tan solo unos días, los príncipes de Mónaco publicaron su nueva postal de Navidad, una foto que recupera la imagen glamourosa de los Grimaldi, cumpliendo con una tradición que se vio interrumpida el pasado año por la ausencia de Charlene en Mónaco tras haber sido internada en una clínica de rehabilitación en los Alpes Suizos.
Para esta nueva postal, que representa la recuperación de la princesa, Charlene y Alberto fueron fotografiados junto a sus hijos, los mellizos Jacques y Gabriella, de ocho años. Los cuatro posaron vestidos de gala en uno de los salones principales del Palacio Grimaldi. Frente al árbol de Navidad, Charlene posó con un vestido negro sin mangas, escote en ‘V’ y tirantes anchos. Para complementar este look festivo, la ex nadadora eligió un llamativo collar de oro, un maquillaje en tonos neutrales y su icónica melena pixie platinada. Por su parte, Alberto II ha elegido un traje azul con corbata a juego, Jacques posó con un traje negro y camisa blanca, pero sin corbata, y Gabriella brilló con un vestido asimétrico de tul en color nude, cinturón dorado y apliques del mismo tono en el cuello y las mangas. La pequeña Grimaldi completó su estilismo con unas sandalias doradas y una diadema de pedrería, convirtiéndose en el centro de atención de la fotografía tomada por Eric Mathon.