Rosalía no para quieta. Tan pronto está grabando en unos estudios de Los Ángeles como prepara una paella con su familia en Sant Esteve Sesrovires, como se va a visitar un lugar mágico en Figueres, como va por las calles de Madrid con una amiga idéntica a ella, como se relaja en una terraza de Barcelona bebiendo Vichy Catalán.

rosalia vichy

Rosalía / @rosalia.vt

La cantante catalana va arriba y abajo y los aeropuertos son como su casa, aunque vaya de incógnito. Ahora ha dejado Catalunya y ha aterrizado en París, donde ha sido recibida como se merece y donde lo primero que ha hecho ha sido una cenita con un grupo de amigos, entre ellos, Kendall Jenner:

floras rosalia

cena rosalia

Veremos qué hace y dónde va después de la capital francesa. Lo que queda claro es que cuando pase por el Charles de Gaulle, no irá ni a la tienda de perfume ni al quiosco. Irá directamente a la zona destinada a las golosinas. Porque cada vez que Rosalía pisa un aeropuerto sigue el mismo ritual: le hace un regalo a alguien muy especial para ella. Y siempre es lo mismo: "ositos y bombones". Suponemos que ositos de aquellos de gominola, o vete a saber si son muñecos de peluche. El caso es que no hay viaje donde no vuelva con una bolsita llena. Cosa que le hace pensar en como de importante es para ella:

tuit rosalia regalos

Seguro que el afortunado/a le agradece que piense tanto en él/a... Y su dentista.