En unas horas, el egarense Miki Núñez y próximo representante español en Eurovisión, actuará a la final del festival en Tel Aviv. Y el mejor remedio para calmar la tensión son las vistas en la playa de la ciudad desde la ventana del hotel donde se aloja. Por eso, y con una mirada y actitud optimista ha recibido a En Azul para poder hacer una valoración de su actuación de mañana.
Miki hace más de dos meses que se está preparando para la actuación que veremos mañana. En pocas palabras, el de Terrassa define su experiencia eurovisiva como a "intensa, con mucha presión, uno sube y baja constante" y destaca la puesta en escena de su canción, una obra elaborada por el maestro Fokas Evangelinos, a un escenógrafo más que reconocido en Eurovisión y que también es autor de la actuación rusa de este año, y Mamen Márquez, que además de ser su profesora vocal, también ha encontrado con ella el amor de madre protectora para apaciguar la tensión de estos días.
Pero hablando de amor, se enorgullece de hablar de la sencillez de su familia y amigos, que llegaron justamente el miércoles, para darle todo el apoyo. "Todo Terrassa está vacía durante esta semana, todos están en Tel Aviv", afirma.
Hablando sobre la actuación que veremos mañana en el escenario, el egarense nos comenta que "no habrá más cambios, está todo hecho, y por lo tanto nos damos por satisfechos con el trabajo que" hemos "realizado". También reconoce que la puesta en escena tiene un objetivo claro, representar artísticamente el mensaje clave de La Venda. Miki comenta que "toda la gente que no entienda el castellano, podrá ver reflejada la esencia de la canción con todo lo que hemos preparado. Por mí, el poder de cada palabra que decimos es lo más importante y así lo verán con la expresión de mi canción".
El poder de cada palabra que decimos es lo más importante y así lo verán con la expresión de mi canción
Miki se ha querido sincerarse sobre el trabajo hecho en los ensayos: "El primero fue bastante mal en cuanto a la realización y porque nosotros tampoco estábamos cómodos, mientras que el segundo fue perfecto, ya que pudimos demostrar todo lo que habíamos trabajado estos cuatro meses, y todavía lo podemos hacer mejor".
Sin embargo, afirma que el trabajo para ir a Eurovisión es duro y que más que ganar o no el concurso, lo que más le llena es quedarse con la conciencia bien tranquila que el trabajo que tenía que hacer lo ha hecho correctamente. Ahora bien, según afirma el catalán "tengo unas ganas locas de cuándo acabe todo eso, toda la gran familia que hemos trabajado en el proyecto, viajamos hasta una isla desierta, con Fokas, y nos relajamos. Nos lo merecemos después de todo el trabajo que" hemos "hecho". Una puesta en escena esmerada y muy milimetrada que Televisión Española ha preparado minuciosamente para mejorar los malos resultados de las ediciones pasadas.
Si de alguna cosa presume Núñez es de mostrarse siempre espontáneo, alegre y así lo ha contagiado al resto de sus rivales del festival. De hecho afirma que ha tenido muy buena relación con el representante belga, Eliott, de lo que ya han hablado, incluso, de colaborar conjuntamente. Por otra parte, también afirma que sus favoritas para alzarse con el trofeo de cristal son las del francés Bilal Hasani, la italiana del joven Mahmood y la del sueco John Lundvik, "está en todo momento en mi cabeza, no paro de cantarla". Y de hecho, no va mal encaminado, ya que se perfila como una de las candidatas para ganar esta edición.
El lema de esta edición es Dare tono Dream (Atrévete a soñar) y, ademanes a hacerlo, Miki considera que, si gana Eurovisión, "Madrid tendría que acoger el festival dado que es la capital de España, pero esta no cuenta con recintos grandes y, en este sentido, en Barcelona tenemos el Palau Sant Jordi y pienso, por qué no hacerlo allí", una posibilidad que adelantó EnBlau.
El representante español también cuenta con el apoyo de otros catalanes que han sido vinculados al festival y así le han demostrado Manel Navarro, sabadellense y representante en el 2017 y Alfred Garcia, el pratenc y representante el año pasado conjuntamente con Amaia.
Pero su primera aparición en la televisión fue el martes pasado durante la primera semifinal donde el presentador del festival, bromeando enseñó una foto suya con el torso desnudo. Sobre el gesto cómico, Miki afirma que "sobre este tema también es bueno sacarse la venda. Me gusta cuidarme y de hecho así me han visto todos mis amigos en las playas del pueblo dónde veraneo".
Una vez acabado el festival, Núñez afirma que tiene muchas ganas de trabajar con su primer disco en solitario: "De las 20 canciones que presenté a Universal, escogimos 12, de las cuales hay 9 que podría seleccionar como sencillo". Además, algunos catalanes como Arnau Griso, Nil Moliner, la banda La Pegatina o sus propios amigos de la Dalton Bang son los nombres que ya ha asegurado que estarán presentes en este trabajo del cual tiene muchas ganas de poder enseñarlo.
Pero volviendo a valorar su paso para Eurovisión, afirma que "si me volvieran a pedir repetir la experiencia, iría con los ojos cerrados, pero también me gustaría poder repetir como compositor. Pienso que es la cosa más cansada que he hecho durante toda mi vida pero que al mismo tiempo es la más satisfactoria con el resultado. Todas las opiniones de todo lo que he hecho son buenas".