Johnny Depp, el protagonista de Piratas del Caribe, no pasa por un buen momento. El actor provocaba la preocupación de sus fans al aparecer en la fiesta de cumpleaños de Lady Gaga con un claro deterioro físico como consecuencia de una pérdida de peso considerable. Sin embargo, la semana pasada sorprendía a los visitantes de la atracción de Disneyland de California para promocionar la quinta película de la saga de piratas, que se estrena el 26 de mayo.

Ahora, sin embargo, vuelve a ser noticia al pisar los tribunales. El actor ha denunciado su despacho de abogados por haberle hecho perder 25 millones de euros al hacer una pésima gestión de su patrimonio. La empresa en la que ha confiado durante 17 años, sin embargo, ha insistido en qué no se hará responsable de la deuda al ser culpa de Depp: "Sufre algún tipo de desorden de gastos compulsivos". Una acusación que quieren demostrar haciendo pasar al actor por un examen psicológico. "Él es el responsable de no saber controlar su dinero", afirman desde el despacho, según la Vanguardia.

Un ex asesor también reveló su trepidante ritmo de vida, que incluía un gasto superior al medio millón de euros en el mes en vinos y aviones privados. Al que se suman los revelados por sus ex abogados, que aseguran que se habría gastado cinco millones de dólares para lanzar las cenizas de un amigo o los "millones" que habría pagado a un hombre que le cantaba los guiones para no tener que memorizarlos.

Depp no se ha pronunciado sobre el tema, pero ya había confesado anteriormente a The Wall Street Journal que él es el responsable de sus finanzas: "Es mi dinero. Si quiero comprarme 15.000 algodones algún día, será mi problema". Unas declaraciones que contradecerían su denuncia.