La reina Sofía tiene las horas contadas. A sus 84 años parece que ha llegado el momento de su jubilación. Con el cambio de reinado, Felipe VI expulsó a todos los miembros de la familia de Casa Real y de los Presupuestos Generales del Estado, a todos menos a una, su madre. La emérita se mantiene hasta la fecha en la institución. Sin embargo, por un tema de salud, los reyes creen conveniente que la mujer de Juan Carlos empiece a descansar y disfrute de sus últimos años de vida con tranquilidad. Con el paso del tiempo ella se ha ocupado de actos sencillos, sin importancia. Además de los religiosos, a los que Letizia si puede evitar no quiere acudir.
La emérita se encuentra con fuerzas, pero ya no es la de antes. Sabe perfectamente que ha llegado la hora. Ya no es una secundaria, ahora es una terciaria. Leonor empieza a destacar y cuando cumpla la mayoría de edad acudirá a algunos actos sola, sin sus padres ni su hermana. La princesa se ocupará de las labores de sus padres cuando eran príncipes, y los reyes de los actos más importantes, como Juan Carlos y Sofía. A los actos más simples irá la infanta Sofía. Ya no será necesaria la presencia de la reina Sofía.
Adiós a Zarzuela
Se cree que la reina Sofía podría anunciar este año su retirada, como ya hizo Juan Carlos en 2019. Es probable que ese anuncio llegue tras la mayoría de edad de Leonor y su 85 cumpleaños. La hermana de Irene de Grecia ya valora otros destinos. Dejaría Zarzuela para siempre. Tiene claro que pasaría los verano en Marivent porque es un lugar donde se encuentra tranquila y en paz, alargaría su estancia debido a las altas temperaturas del país. Pero el resto del año lo pasaría entre Londres y Grecia, sus dos destinos favoritos.
A Reino Unido acudía en muchas ocasiones porque allí vivió su hermano Constantino de Grecia e su exilio. Pero ahora que ha fallecido ya no le queda absolutamente nadie en tierras inglesas, así que es muy probable que regrese con sus familiares a Grecia, donde también tiene grandes amigos y recuerda su infancia. Allí está toda su vida y le encantaría terminar sus días donde empezó todo. De hecho, el día que se muera, ha pedido a su hijo que se la incinere y se tiren sus restos mortales al mar Egeo.
