Iñaki Urdangarin vive instalado entre Barcelona, donde quiere recuperar su profesión como experto en balonmano y coach, y Vitoria, donde vive su madre y su novia Ainhoa. En Barcelona tiene otro incentivo, vive allí su segundo hijo, Pablo, que juega en el Barça. La infanta Cristina e Iñaki tienen cuatro hijos de 23, 21, 20 y 17 años. Cada uno reside en una ciudad europea diferente, del mayor a la pequeña: Juan en Madrid, Pablo en Barcelona, Miguel en Londres e Irene en Ginebra. Es la familia más desestructurada de España. Por eso una vez divorciados los padres, cuando los cuatro hijos se reúnen es noticia. Este fin de semana los tres chicos han estado en Barcelona con el padre. Reunión masculina de Iñaki con los tres, y los paparazzis de la revista a Semana los han pillado abrazados y sonrientes. Sonrientes dentro de la medida Urdangarin, ya que siempre parecen tristes, lánguidos y depresivos. Excepto Pablo, el culé, todos los otros acostumbran a lucir cara larga. De la foto de portada se ve cómo ha cambiado Miguel, de 20 años. No parece él:
En la foto de izquierda a derecha son Miguel, cogiendo del hombro a su padre Iñaki y delante tienen Juan y Pablo. El que ha cambiado más es el hijo pequeño, que ya tiene 20 años. Miguel Urdangarin es el que vive más lejos, fuera del continente y de la Unión Europea, en Londres estudiando Ciencias del Mar. Era el de aspecto más empollón, con gafas redondas, y rechoncho. Ahora ha hecho como sus hermanos, se ha estirado, se ha estilizado, se ha hecho más rubio, pelo largo, se ha puesto lentillas y es todo un hombre, casi tan alto como su padre, que mide 2 metros (1,97m). Así era y así es Miguel:
MIGUEL URDANGARIN 17 AÑOS:
MIQUEL URDANGARIN 20 AÑOS:
Miguel es el más listo de la familia, nacido en Barcelona, catalán, estudió en el Liceo francés, es el ahijado del rey Felipe, toca el piano, lleva el pelo con un corte menos Pedralbes, sin la raya en el medio. Deja aquella indumentaria clásica de polos, camisas y pantalones Dockers chinos y escoge una camiseta gris más favorecedora. Es deportista y le gustaba correr por Barcelona cuando vivía allí. También abandona las pulseras que lucía junto con su hermana Irene, que optaba por una bandera rojigulada en la muñeca, bien adoctrinada a pesar de ser menor de edad.
Miguel e Irene con pulseras de España
Cuando el rey Juan Carlos fue hospitalizado la Casa Real aprovechaba para ofrecer una imagen de unidad. Los diferentes miembros de la Familia del rey van desfilando: Felipe y Sofía, Felipe y Letizia, la heredera Leonor o las dos infantas. El caso más observado ha sido el de la exiliada Cristina. Fuera de foco, en Suiza, la hermana de Felipe aparecía con tres de sus cuatro hijos. Y la sorpresa saltaba al ver los looks. Las revistas del corazón se fijan en las niñas como presuntos it girls pero En Blau para el ojo en el adoctrinamiento real: pulseras con la bandera de España
Cristina con Juan, Miguel e Irene, GTRES
EFE / GTRES
El padre corrupto pero los niños patriotas.