Casa real tiene un problema grave con la libertad de expresión. El jefe del Estado considera inadmisible que un matemático premiado por la Fundación princesa de Girona se ponga un lazo amarillo al recoger el galardón. El lazo pide la libertad de los condenados por el procés. ¿Dónde está el problema democrático de desear esta libertad? Zarzuela ha escondido la foto de Xavier Ros-Oton al recoger el premio y sólo ha difundido imágenes de cuando no lo llevaba en la solapa.
Al día siguiente, el martes, ha vuelto a pasar. En una sala del Palacio de Congresos los reyes debatían con jóvenes y las cámaras de En Blau han captado que uno de los moderadores de los debates llevaba un lazo amarillo a la solapa. El rey Felipe le ha dado la espalda para evitar la foto. No quieren nunca ninguna imagen de Felipe al lado de una estelada o de un lazo amarillo. Este es el vídeo exclusivo:
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