Tiene 51 años, un talento descomunal delante de cámaras y la cabeza muy bien amueblada. La actriz vasca Itziar Ituño, aparte de su calidad interpretativa, que tiene mucha, como ha demostrado sobradamente en papeles en, sobre todo,La casa de papel, pero también en otros como Cuéntame cómo pasó, Intimidad, Detective Touré, Loreak, El silencio de la ciudad blanca, Irati..., es una persona que no se calla ni piensa callar, y que defiende sus ideas y planta cara a los ultras e hiperventilados, a menudo de las españas, que se indignan porque ella diga lo que diga. Acaba de presentar la película La deuda de Daniel Guzmán, un thriller social con el problema de la vivienda de fondo, motivo por el cual ha concedido una entrevista para eldiario.es.

Ituño sabe que a menudo, por hablar claro, ha recibido la ira de los ultras que se le han lanzado a la yugular. Hace unos meses, la intérprete estuvo en primera fila en una manifestación para reclamar que se aplique a los presos de ETA la política penitenciaria ordinaria y no se recurra su progresión a tercer grado ni los permisos. Una imagen que hizo echar espuma por la boca a gente como Federico Jiménez Losantos ("La titiritera esta creo que es de 'La casa de papel'. Nunca he visto ese tinglado. Pues eso, le darán un Goya. ¿Con esto? ¿Si es proetarra? Vamos, sin ninguna duda") o Macarena Olona ("Los que portaban esa placa que ella lleva en La Casa de Papel son los que murieron por combatir a los cobardes de los tiros en la nuca. Esos que ella llama presos políticos y pide que se excarcelen. Le queda muy grande nuestra Policía. También en la ficción").

Itziar Ituño IG
Itziar Ituño IG
Itziar Ituño 2g
Itziar Ituño IG

Ahora continúa defendiendo que pueda y quiera hablar de lo que le salga del moño: "¿Por qué no voy a opinar yo más allá de mi oficio, de todo este tinglado? Tengo todo el derecho. Y a salir de repente en una marcha, en una manifestación, que estoy en mi derecho". Con las reacciones furibundas que vivió, tiene claro qué pasa en España: "Ahí le ves un poco al monstruo de frente, porque hay un monstruo muy feo, muy feo que viene desde la dictadura y sigue ahí, más o menos camuflado, pero sigue. Y de repente saca las garras y los colmillos. Si yo misma me niego esos derechos y me autocensuro, ¿qué va a pasar con todo el mundo?". Ituño tiene claro que si todo el mundo calla, mal: "El que calla otorga. Yo sí que creo en eso. Es verdad que hablar a veces supone que te cercenen la cabeza o traten de ponerte un esparadrapo o te cancelen… es el mundo en que vivimos".

Después de sus palabras, como siempre, han salido de la cueva los ultras que le han dedicado graves insultos a la actriz: "Es difícil de creer. Para que se te caiga la cara de vergüenza, hay que tener vergüenza, algo que la furcia proetarra no conoce", "Etarra hija de puta", "Creía que iba a decir que con su primer sueldo se compró un arma . Ya tu sabes"... Viendo estos comentarios, todavía respetamos más a una actriz como Itziar Ituño, que a pesar de estos insultos, seguirá diciendo lo que crea cuando lo crea.