Una de las personas que probablemente haya en España que saben más por lo que callan que por lo que explica, y ha explicado bastante, es Bárbara Rey. La actriz, exvedette y sobre todo, amante más célebre del emérito Juan Carlos, ahora está comentando Una vida Bárbara, la docuserie sobre ella que está triunfando en Antena 3. A raíz de esta producción, Rey está saliendo por los diferentes programas, para explicar cosas ya sabidas, pero regalando a la audiencia algunas reflexiones y afirmaciones sensacionales. Como por ejemplo, que después de encamarse con Juan Carlos, le era imposible dirigirse a él como a rey, su majestad o algún servilismo del estilo... "Cuando te has metido en la cama, no puedes mirarlo como a un Rey":

No es lo único que ha dicho. Le han puesto encima de la mesa el nombre de otra de las amantes más célebres del Borbón, de las más recientes: Corinna. ¿Y cómo ha reaccionado cuando la comparan con ella? Que no tendría ningún problema, envidiando que a la alemana no se la menosprecia ni se dicen tantas falsedades como sí se hace con ella... Otro momento captado por el colaborador de Alfonso Arús y crítico televisivo Sebas Maspons:

Sin duda, sin embargo, el gran momento fue cuando recordaron un momento grotesco. Una situación esperpéntica vivida por el monarca un día que la fue a ver para hacer una caidita de Roma a casa de su amante. "Al lado de mi casa, en el número 14, yo vivía en el 15". Explica que la persona ya no vivía allí, y que Juan Carlos, cuando llegó a casa de Rey, vio cómo eran unos edificios adosados que se parecían los unos a los otros por fuera... y se metió donde no debía, en casa ajena. Juan Carlos y el chófer se meten en el parking: "Yo estaba esperando y decía '¿Qué pasa?, me acaba de llamar hace un momento que estaba en la esquina y yo con la puerta abierta y no llega. Le llamé, y me dijo 'Estoy en la puerta y no me abre nadie. Me he equivocao! Sal corriendo de allí!":

Juan Carlos, entrando donde no toca... por un affaire de faldas... ¿Cuántas veces habrán dicho esta frase los cuerpos proporcionados por Zarzuela para velar por su seguridad? Un esperpento más, una nueva muestra de cómo de tarambana y grotesco es y ha sido el emérito. Poco a poco, Bárbara Rey va dejando caer más píldoras jugosas sobre la que probablemente haya sido la relación adúltera más famosa de la historia de España. La animamos desde aquí a estirar todavía más del hilo y deseamos que llegue el día en que explique más intimidades de cuando ella y él se encamaban a espaldas de la reina Sofía... Probablemente, sin embargo, si eso pasa, quien se tendrá que marchar del país no tendría que ser solo Juan Carlos, sino también ella...