El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, ha asegurado estar dispuesto a hablar de los problemas reales de los catalanes, eso sí, no quiere hablar de "cómo liquidar la soberanía nacional" ni de "cómo se incumple la ley". Es decir, de todo, menos de referéndum, lo que no ve como un problema 'real' para la ciudadanía.

Rajoy ha hecho estas declaraciones junto al presidente de Francia, François Hollande, después de haberse reunido en el marco de la cumbre Hispano-Francesa celebrada estos días en Málaga. Lo ha dicho al ser preguntado por los periodistas sobre si su gobierno está preparando una propuesta para Catalunya, después de asegurar que durante la reunión con el presidente francés no se ha hablado del caso catalán.

Aún así, no ha querido ni asegurar ni desmentir, a pesar de la insistencia de los periodistas, si había habido encuentros entre su gobierno y la Generalitat, como había afirmado este domingo Enric Millo. Unos encuentros que sí que ha querido desmentir el presidente del PP Catalán, Xavier García Albiol.

Infraestructuras e inversiones

El presidente español se ha mostrado dispuesto a hablar de infraestructuras e inversiones, y ha vuelto a lamentar que Puigdemont no asistiera a la Conferencia de Presidentes que se celebró el mes pasado en el Senado, ya que asegura que allí se debatió "lo que importa" a la ciudadanía. Según el presidente, en aquella reunión se habló de financiación autonómica, de los problemas de demografía y de las inversiones.

Todos ellos, son los "problemas reales" de los catalanes, según Rajoy, mientras que no lo es el referéndum. Eso, a pesar de haber una amplía mayoría parlamentaría a favor de este, y de que entre un 70 y 80% de los catalanes esté a favor de celebrarlo.

También Rajoy ha hablado del Corredor Mediterráneo y ha asegurado que su gobierno está trabajando en muchos tramos de esta infraestructura, como el de Castellón, el de Valencia, el de Murcia, y también el que une Tarragona y Vandellòs. Además, ha asegurado que "continuará en el futuro hasta la frontera".

Radicalismos y extremismos

Además, el presidente ha recalcado que las instituciones catalanas "están en manos de extremistas radicales", refiriéndose a la CUP, y ha instado al Govern a "representar al conjunto de los ciudadanos". Rajoy considera que las instituciones "no pueden estar al servicio del independentismo" y que tienen que aspirar a representar "al 100% de los ciudadanos".

El presidente también ha asegurado que el procés "ha dividido a la sociedad", ha provocado una "colisión interna" y "no ha ayudado a la sociedad".

"Si hubiera conversaciones secretas, no lo iba a contar yo"

En una entrevista posterior en Tele 5, el presidente del Gobierno ha vuelto a desviar la atención sobre la existencia de conversaciones secretas entre los gobiernos español y catalán, tal y como había defendido Enric Millo, afirmando que "si hubieran conversaciones discretas o secretas, no lo iba a contar yo, porque dejarían de ser secretas".

Asimismo, Rajoy reiteró que mientras ocupe la presidencia del Gobierno "la soberanía de España no se discutirá", para añadir que está dispuesto a tratar temas como al "financiación autonómica, las pensiones o la dependencia", para criticar una vez más la inasistencia de Carles Puigdemont en la pasada conferencia de presidentes autonómicos.