La Generalitat invertirá 80 millones de euros hasta el 2026 para impulsar la producción de biogás en Catalunya. El objetivo del Govern es multiplicar por 3,5 la producción actual de biogás y pasar de las 72 instalaciones actuales a las más de 150 en el 2030. Así lo ha anunciado el conseller de Acción Climática, David Mascort, quien ha añadido que se prevé reducir la emisión de 350.000 toneladas de CO₂ cada año. Mascort ha hecho el anuncio durante la inauguración de la primera planta del Estado que producirá biometano a gran escala.

La presentación se ha llevado a cabo en el vertedero de Can Mata (Hostalets de Pierola) y transformará el biogás procedente de la degradación de los residuos en biometano, una energía renovable que reduce las emisiones de gas de efecto invernadero y la finalidad es evitar la emisión de 17.000 toneladas de CO₂ cada año.

Catalunya, "punto estratégico en la generación de biogás"

En este sentido, el conseller de Acción Climática ha indicado que el Govern aprobará este 2023 la Estrategia para el biogás de Catalunya 2023-2030 con la finalidad de incentivar la producción de este gas renovable en el país. Entre otras medidas, Mascort ha comunicado que entre los años 2024 y 2026 se invertirán 80 millones de euros en ayudas para poder financiar nuevas plantas de biogás, pero también en la depuración del biogás en el biometano y en las conexiones hasta la red de distribución.

De hecho, Mascort cree que Catalunya "será un punto estratégico en la generación de biogás en todo el Estado" y ha señalado que el Govern tiene sobre la mesa prácticamente un centenar de proyectos de plantas de estas características. Todo eso para que se pueda multiplicar por 3,5 la producción actual el año 2030 hasta representar el 5,7% del consumo actual de gas natural.

Transformar los residuos en energía limpia

La nueva planta de producción de biometano aprovecha el biogás generado por los residuos depositados en el vertedero de Can Mata a través de la biometanización, un proceso biológico en que parte de la materia orgánica de los residuos se transforma en una mezcla de gases. El proyecto está impulsado por el grupo PreZero, que gestiona el vertedero, con dos socios más: Waga Energy, que ha desarrollado la tecnología, y Nedgia, que se encarga de su distribución a través de la red. El proyecto ha costado unos 10 millones de euros y ha recibido una subvención de 2,4 millones de euros más de fondo europeos, según la ACN. Se calcula que se inyectará suficiente biogás en la red para garantizar el consumo de gas de 14.000 hogares.

Las plantas de biogás pueden ofrecer energía en el entorno donde se instalan, sea produciendo electricidad, calor o biometano, dinamizan la economía, sobre todo en zonas rurales, y sacan provecho del potencial local de generación de energía renovable con criterios de eficiencia energética. Además, permiten aprovechar los materiales orgánicos residuales para generar energía, cosa que contribuye a la mejora ambiental, y favorecen el tratamiento de las deyecciones ganaderas para mejorar su gestión y su valorización como biofertilitzantes.