Después de meses presionando al gobierno español para que rebaje la presión fiscal de la central nuclear como condición para pedir la prórroga al cierre de la central nuclear de Almaraz, en EXtremadura, las grandes eléctricas han hecho un nuevo movimiento que aún no se considera petición formal, según han asegurado a ON ECONOMÍA fuentes del ministerio de Transición Ecológica (Miteco). El ministerio "ha recibido una carta de Endesa, Iberdrola y Naturgy en la que exclusivamente trasladan su "disposición" para ampliar el calendario de cierre de la central nuclear de Almaraz", dicen fuentes de este. "No se notifica nada ni se adelanta ningún tipo de actuación", aclaran.
Fuentes del mismo ministerio insisten en que "no ha cambiado la posición" con respecto al estudio de esta prórroga de una central que tiene previsto su cierre en 2027 y que desde Extremadura cubre gran parte de la demanda eléctrica de la Comunidad de Madrid. Para estudiarla, "la propuesta debe cumplir tres líneas rojas": que se garantice la "seguridad" radiológica de los ciudadanos, que no cueste dinero a la ciudadanía y que sea "conveniente para garantizar la seguridad de suministro".
Hace unos días, las empresas reconocían que trabajaban para presentar una propuesta formal antes de que acabe este mes, pero esta carta todavía no lo es, según aseguran con contundencia desde el ministerio. Fuentes de Endesa aclararon a ON ECONOMIA que la petición para prorrogar el cierre de las centrales catalanas de Vandellòs y Ascó irá por separado y es independiente, aunque desde el Foro Nuclear han insistido varias veces en que la prórroga de Almaraz, si se hace efectiva, será un buen precedente para pedir el alargamiento de la vida útil de las nucleares catalanas.
Cataluña y la Comunidad de Madrid, ambas con un gran déficit de renovables, son dos de las regiones con más dependencia de la energía nuclear para su electricidad. Desde que tuvo lugar el apagón del pasado mes de abril, las voces de las grandes eléctricas propietarias de las centrales han insistido en que la energía nuclear da seguridad de suministro a la red ante unas renovables más oscilantes. Otras voces, en cambio, defienden que hay que apostar por las renovables y ven en las nucleares un riesgo innecesario por el tratamiento de los residuos, además de un coste más elevado de producción que la eólica o la fotovoltaica.
Más allá del debate sobre su fortaleza, tanto la Comunidad de Madrid como Cataluña verán aumentada exponencialmente su dependencia energética con otras regiones si se cierran estas centrales.