Esta semana, el protagonismo en la bolsa española se lo ha llevado Telefónica y el grupo saudí STC que se ha convertido en su primer accionista (con un 9,9%), pero a lo que con más inquietud han estado atentos los mercados ha sido a las señales de debilidad económica, sobre todo en Europa, y el repunte del petróleo, que puede interrumpir el descenso de la inflación. Y ello porque el próximo jueves el Banco Central Europeo (BCE) debe tomar una nueva decisión sobre la evolución de los tipos de interés. La autoridad monetaria se debate entre parar su senda de subida de tipos, tras nueve alzas consecutivas, o seguir con la estrategia de endurecimiento monetario, que en esta ocasión podría rondar el cuarto de punto. El repunte de los precios energéticos pone en riesgo la moderación de la inflación y puede hacer que el BCE se incline por nuevas subidas de tipos que los inversores no esperaban. Telefónica acumula una subida semanal del 0,47% lograda íntegramente después de conocerse la entrada en su capital del operador de telecomunicaciones saudí STC, que se ha hecho con un 4,9% y tiene derechos para adquirir otro 5% adicional.
Con este trasfondo, el IBEX 35 ha cerrado esta semana con un descenso del 0,9% respecto al pasado viernes, hasta situarse en los 9.364,6 puntos, nivel muy próximo a la media de los cierres del índice del último mes móvil (9.383 puntos). Aunque la jornada de este viernes giró en positivo, con un ligero avance del 0,59%. De hecho, el selectivo español cotiza sin rumbo desde los máximos anuales de finales de julio y en las últimas tres semanas ha subido seis días consecutivos y ha descendido en siete de las ocho siguientes sesiones.
El sector bancario, cuya cotización es sensible al ciclo económico (a mayor desaceleración, menos créditos nuevos y más riesgo de impago de los concedidos), ha registrado abultadas caídas esta semana: BBVA se deja el 4,05%, el tercer mayor descenso, CaixaBank y Santander pierden más del 3%; Sabadell, el 2,7%; Unicaja, el 1,87%; y Bankinter, el 1,19%. Los dos grandes bancos han sido los únicos de entre los grandes valores con pérdidas semanales: Iberdrola ha avanzado el 0,6%, Inditex, el 0,83%; y Repsol, el 1,29%, beneficiado por la subida del petróleo. En la parte más negativa, Grifols (5,16%) y Fluidra (4,26%) encabezan las pérdidas, mientras en el lado opuesto las acciones de Indra, que hoy han marcado su máximo anual, avanzan el 3,6%, y las de Ferrovial, el 1,79%.
El petróleo alcanza los 90 dólares
El aluvión de malos datos económicos ha coincidido además con un repunte del precio del petróleo y depreciación del euro, lo que alienta el temor a que la inflación se mantenga elevada o repunte -en agosto repitió la tasa de julio (5,3%)-. Arabia Saudí y Rusia anunciaban el martes su intención de prorrogar hasta final de año los recortes de producción para presionar al alza los precios e inmediatamente después el Brent superaba los 90 dólares por barril, un nivel no visto desde noviembre de 2022. En la semana acumula una subida del 2,6% y desde principios de agosto se ha encarecido el 6,2%.
Además, en agosto el gas natural también ha subido y ha superado los 40 euros por MWh por el miedo a una posible escasez de suministro motivada por conflictos laborales en instalaciones de Australia y paradas por mantenimiento en otras de Noruega.
En el mercado de divisas, el euro retrocede el 0,6% desde el lunes y suma ocho semanas consecutivas de caída frente al dólar, divisa en la que se paga el petróleo.