Cuando los militares regresaron de la II Guerra Mundial a los Estados Unidos, les era difícil adaptarse a la vida civil y encontrar trabajo. Fue entonces cuando surgieron los procesos de outplacement o recolocación para encontrarles un nuevo empleo. Desde entonces, estos procesos se han ido extendiendo por el mundo y, en España, son una realidad tan asentada que, desde el año 2012, existe una ley que obliga a que las empresas con más de 50 trabajadores que ejecuten un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) incluyan un plan de recolocación externa con una duración mínima de seis meses. Pero, más allá de los recortes de plantilla, también una empresa puede pedir un proceso de recolocación para un despido individual o un trabajador asesoramiento para cambiar de trabajo y contratar a una empresa de recolocación si quiere dar un giro o un salto a su carrera. Existen 150 agencias reconocidas por el SEPE autorizadas para acometer estos procesos de recolocación. 

"Eso supuso un cambio radical que multiplicó estos proyectos. Hasta entonces era algo que se hacía de forma puntual en algunas multinacionales". Quien lo explica es Orestes Wensell, director general de Talent Studios de Manpower Group, multinacional de recursos humanos que también se dedica a procesos de recolocación. Según este informe, el tiempo medio de recolocación para las personas que participan en procesos de recolocación es de 3,9 meses de media, una cifra récord en este tipo de procesos, que consiguen que siete de cada diez profesionales mejoren o igualen su compensación con relación al empleo anterior

24.215 despidos en planes colectivos

España contó, entre enero y noviembre del año pasado, con 24.215 despidos dentro de planes colectivos, lo que supone un 44,54% menos que en 2021, según datos del ministerio de Trabajo. La media de 110 días para encontrar un nuevo trabajo de las personas que se acogieron a este tipo de procesos supone, según el estudio, un 60% menos que quienes no se acogieron a ellos. Es, además, una cifra récord, lo que demuestra también el momento de gran volatilidad que vive el mercado laboral, así como la constante búsqueda de talento de las empresas, a pesar de que España siga contando con desempleo. 

"De lo que se trata es de mejorar la empleabilidad y ayudar a conectar a los trabajadores con potenciales oportunidades de empleo y es especialmente necesario en trabajadores de mayor edad", cuenta Wensell. En los Expedientes de Regulación, las personas de mayor edad suelen estar entre las más afectadas y, a la vez, son uno de los colectivos más discriminados en los procesos de selección, por lo cual para ellos este proceso puede ser determinante. 

"Primero hay que asesorar individualmente, y darle apoyo desde el punto de vista emocional cuando está viviendo un proceso de despido. Miramos qué alternativas y oportunidades hay en el mercado laboral, qué capacidades tiene, si valora el emprendimiento como una opción, si quiere seguir en su sector o incluso si quiere cambiar de sector", explica Wensell. 

Un 97% de recolocaciones en menos de 12 meses

Después, y hoy en día esto es más importante que nunca, "debemos trazar una estrategia de comunicación", apunta Wensell. "Eso significa trabajar el perfil en redes, mejorar el currículum y definir hacia adónde apuntar el proceso en función del estudio hecho previamente", añade. 

Y, por último, un paso que es clave y que es difícil de abordar individualmente, la gestión de las redes de contactos. "Es importante, antes de contactar, tener una estrategia real y conocedora del terreno donde quieres aproximarte. Y, después, saber qué márquetin utilizar, qué referencias y cómo usarlas. No solo se trata de contactar a las empresas, sino también de ver qué es lo que aporto a un proceso de selección y cómo debo contactar con estas empresas", añade Wensell. La parte de la red de contactos es la más valorada por un 70% de los encuestados por Manpower que participaron en estos procesos. 

Según los cálculos de Manpower, el 97% de las recolocaciones culmina en menos de 12 meses cuando se da un proceso de outplacement o recolocación. Un 33% encontró trabajo en menos de tres meses. Además de en expedientes de regulación de empleo, también se aplica en despidos individuales (más del 50% de servicios de Manpower son para recolocaciones particulares) e incluso para a asesorar a personas que tienen trabajo pero que buscan un cambio en su trabajo. Eso sí, son asesoramientos que pueden costar más de 3.000 euros y 12.000 en el caso de directivos que buscan cambiar de empleo.  "La escasez de talento ha ayudado a que el éxito de recolocación sea aún mayor", aporta Wensell, que desvincula una mejor recolocación a menores índices de paro.

La media de edad de los procesos de recolocación apunta al talento senior, pues lo protagonizan trabajadores con una media de edad de 46 años y solo un 9% de los recolocados tienen entre 20 y 29 años. A nivel geográfico, Madrid, con un 25% de los procesos de outplacement y Barcelona, con un 21%, protagonizaron más de la mitad de los procesos de recolocación de España. 

El sector químico y el farmacéutico, con un 17% de incidencia, fueron los que más procesos vivieron, por encima de los servicios (14%), la industria (13%) y la logística y la distribución (12%). Un 65% de los profesionales consiguen el nuevo trabajo en el mismo sector.