El grupo automovilístico Renault registró unas pérdidas netas de 700 millones de euros en el 2022, después de obtener un beneficio neto de 967 millones de euros al ejercicio anterior, según los datos presentados este jueves por la compañía francesa. A pesar de todo, ven el vaso medio lleno: "En el 2022 ha cumplido con creces sus promesas: con resultados por encima de nuestros objetivos iniciales y expectativas de mercado. Este rendimiento refleja la energía y el trabajo duro de los equipos del grupo Renault, incluso cuando hemos enfrentado fuertes obstáculos relacionados con la venta de nuestras operaciones en Rusia, la crisis de los semiconductores y la inflación de costes," ha señalado al consejero delegado de Renault, Luca de Meo.
Todo eso después de que la compañía francesa aumentara la facturación hasta los 46.391 millones de euros, un 11,35% más que los 41.659 millones de euros de ingresos registrados en el 2021. Así, las ganancias operativas del grupo Renault alcanzaron los 2.216 millones de euros, un 146% más que los 900 millones de euros registrados el ejercicio anterior. En este sentido, la compañía ha ajustado la información financiera publicada en el 2021 a causa de las operaciones discontinuadas en Rusia. El consorcio automovilístico francés calcular que buena parte de las pérdidas, 338 millones de euros, se deben a causa de la salida del mercado ruso después de la invasión en Ucrania. Un ejercicio complicado y que supone devolver a números rojos. A pesar de todo, ahora las perspectivas son de mejora. En un entorno todavía difícil, el Grupo pretende mejorar su rendimiento en el 2023 con un margen operativo del grupo superior o igual al 6% y un flujo de caja libre operativo de automoción superior o igual a 2.000 millones de euros.
Más margen para aumentar las existencias
A 31 de diciembre de 2022, las existencias totales de vehículos nuevos (incluida la red de concesionarios independientes) representaban 480.000 vehículos enfrente de los 336.000 a finales de diciembre de 2021. Este aumento se explica por el aumento de las existencias de los concesionarios independientes, sobre todo a causa de las tensiones logísticas salidas a la final de año. Este nivel de existencias se tiene que poner en perspectiva con el nivel de registro del libro de pedidos. La posición financiera de Automoción es ahora positiva con +549 millones de euros el 31 de diciembre de 2022 enfrente de los -1.100 millones de euros ajustados de las operaciones de AVTOVAZ y Renault Rusia el 31 de diciembre de 2021, una mejora de 1.600 millones de euros.
Éxito de los eléctricos, fracaso del diésel
El éxito de Renault Megane E-TECH Electric lanzado a finales del segundo trimestre del 2022, Renault Arkana lanzado el segundo trimestre del 2021, así como el Dacia Jogger lanzado el primer trimestre del 2022, evidenciaron la renovación y la ofensiva de las marcas Renault y Dacia en el segmento C que generaron el año 2022 un efecto mix de producto positivo de +2,8 puntos. El impacto de las ventas a los socios, negativo en -1,4 puntos, fue debido principalmente a la disminución de la producción de motores diésel y vehículos para los socios del Grupo Renault (finalización de contratos de Master para Opel y Traffic para Fiado a finales de 2021).
¿Y Nissan?
Por otra parte, los resultados de Nissan el tercer trimestre de su año fiscal (de abril a diciembre) han tenido un impacto positivo en las cuentas del grupo Renault de 174 millones de euros. Para el 2023, la compañía se ha fijado el objetivo de incrementar un 6% el margen operativo, que cerró en el 2022 en 2.595 millones de euros (+125% en términos interanuales).