Inteligencia artificial, seguridad en el uso de datos, realidad virtual y la aplicación de sistemas informáticos complejos a la cotidianidad del día a día. La Gran Vía de Fira Barcelona está siendo un cultivo permanente de propuestas y descubrimientos esta semana, que se dividen entre los congresos internacionales del ISE y el IOT. Las propuestas son bien diferenciadas las unas con las otras, pero también representa una gran oportunidad para pequeñas y medianas empresas locales que aprovechan el escaparate internacional que tienen al lado de casa para hacer su gran presentación en sociedad. Es el caso de Evowater, que utiliza la tecnología para ofrecer un agua libre de residuos.

Un software para eliminar residuos y bacterias

David Tena, cofundador, nos explica desde el IOT que este es el último paso antes de salir al mercado finalista: "Aprovechamos el contacto con partners y grandes expertos, para cerrar los últimos flequillos de un proyecto que nos ha llevado más de dos años y que esperamos recibir un buen feedback". El producto es un software que se podrá comercializar este próximo verano, cuando la campaña para este tipo de soluciones es más demandada. "Gracias a la tecnología, a un software creado por los otros dos socios y yo, ofrecemos una respuesta automática a los problemas de higiene que se derivan de dispensadores, ya sea de cafeteras, bombonas de agua o, incluso, para hacer zumos".

Los sistemas de aguas, que normalmente tienen cientos o miles de litros diarios fluyendo, las tuberías y otros equipamientos pueden permanecer inactivos durante periodos indeterminados de tiempo, a veces incluso meses. El estancamiento puede causar serios problemas que generan daños a largo plazo, reduce el valor de las propiedades y es difícil de atajar una vez que el edificio comienza a funcionar normalmente. El caudal bajo y el estancamiento en los sistemas de agua reducen los niveles de desinfectante y estabilizan las temperaturas (ambiente). Esto supone un caldo de cultivo ideal para que se formen biofilms en los tanques de almacenamiento en agua fría y caliente y en las tuberías, en los calentadores de agua, en los cabezales de ducha, grifos, máquinas de hielo, piscinas, bañeras de hidromasaje, fuentes decorativas y torres de refrigeración. Los biofilms son conjuntos de bacterias adheridas a la superficie, directamente relacionadas con problemas graves de corrosión, biosuciedad y crecimiento de legionella y otros patógenos. Una vez desarrollados, los biofilms son difíciles de eliminar de los sistemas de agua, incluso con altos niveles de desinfectantes.

Ahorro económico

Así pues, especialmente en espacios como oficinas o ámbitos colectivos y compartidos, la tarea de limpiar estos recipientes, demasiado a menudo, queda olvidada o nadie coge la responsabilidad. Por otra parte, requiere la atención de un especialista que tiene que venir y vaciar todo aquello que se ha podido contaminar por un pequeño desuso o descontrol de estos sistemas: "Nosotros, lo que hacemos es monitorizarlo y controlamos cuándo se ha dispensado aquella agua, cuándo ha podido quedarse estancada o, incluso, si ya hay contaminación en forma de bacterias", sostiene Tena. A partir de aquí, el software aplica un proceso automático de higiene de todo el aparato que se adapta a cualquiera. Tena subraya que ellos no crean la fuente, sino que trabajan para cualquier tipo de dispositivo y lo que hacen es convertirlo en inteligente, "smartificarla".

Los procesos contaminantes se dan cuando el agua puede estar estancada, por ejemplo, después de tres o cuatro días ya se perciben bacterias. Esto puede pasar después de Semana Santa o posterior a cualquier periodo de vacaciones. Las empresas tendrían que avisar de que se tiene que vaciar, pero en la práctica no lo hacen. En el uso doméstico también podemos incorporar nuestro software, pero es más fácil evitar este tipo de situaciones en el domicilio donde la responsabilidad de tenerlo neto genera más empatía.

¿Cómo funciona?

En paralelo a la parte higiénica o de salud, Evowater también pone el acento en el coste económico que se puede ahorrar la empresa en cuestión ya que no hay que pagar el traslado de una persona especialista para que venga y lo desinfecte todo, se hace de forma automática y a la distancia. El funcionamiento es sencillo. Se deja un depósito con el producto encargado de llevar a cabo esta higiene y se activa todo el proceso cuando el agua está contaminada. El mismo software se encarga de bloquear el sistema mientras se realiza esta tarea para que no pueda ser utilizado y accede a todos los depósitos para hacer una revisión completa.

Este software, desarrollado de forma íntegra en Barcelona, ha sufrido muchos cambios de proceso y de mismo concepto hasta llegar al modelo actual. Aseguran que el mercado es amplio ya que no hay competencia en el mercado que se haya fijado en este aspecto y no tiene ningún tipo de límite: "Podríamos pensar en la capacidad del depósito, pero la solución es sencilla. Tan solo hará falta tener una reserva del líquido higiénico más elevada si los litros son mayores o, en vez de poner cada año y medio, hacerlo un poco antes", concluye Tena.