Santander repartirá este martes, 2 de mayo, un dividendo complementario entre sus accionistas con cargo a los beneficios de 2022 de 0,0595 euros brutos por título, lo que eleva el importe total a unos 979 millones de euros. Este dividendo se une al que ya repartió en noviembre de 0,0583 millones de euros con cargo a los beneficios de 2022, y que también supuso un desembolso de 979 millones de euros.

De esta forma, a través de pagos en efectivo, el banco dará un total de 1.958 millones de euros a sus accionistas, lo que supone un 20% del beneficio que obtuvo en 2022 de 9.605 millones de euros. Para complementar estos dividendos en efectivo, Santander también ha puesto en marcha dos recompras de acciones por idéntico importe, lo que cumple con el 'pay out' del 40% del banco para el pasado ejercicio.

La junta general de accionistas de aprobó un dividendo final en efectivo por acción de 5,95 céntimos de euros, con cargo a los resultados de 2022. Con ello, el dividendo en efectivo total del Santander será de 11,78 céntimos de euro por acción, un 18% más que el año anterior.

El banco también ha llevado a cabo un nuevo programa de recompra de acciones por valor de 921 millones de euros, tras haber recibido la correspondiente aprobación regulatoria. Lo que hace que, una vez completadas estas acciones, la remuneración total al accionista en 2022 haya sido de 3.842 millones de euros (en torno al 40% del beneficio ordinario de 2022), repartidos entre dividendos en efectivo (1.942 millones de euros) y recompra de acciones (1.900 millones de euros), lo que supone una rentabilidad equivalente por encima del 8%.

A finales de febrero, Santander anunció, sin embargo, que elevaría su política de retribución al accionista desde aproximadamente el 40% hasta el entorno del 50% del beneficio entre 2023 y 2025, tanto a través de dividendos en efectivo como con recompras de acciones.