Deutsche Bank ha obtenido un beneficio neto atribuido de 1.921 millones de euros hasta junio, un 9 % menos que un año antes (2.106 millones de euros), debido a unos costes no operativos más elevados y al aumento de las provisiones. Deutsche Bank ha informado este miércoles de que los ingresos netos han subido entre enero y junio hasta 15.089 millones de euros (+8 %) sobre todo en la banca para empresas.

El primer banco comercial privado de Alemania ha incrementado en los mismos meses las provisiones para créditos morosos hasta 772 millones de euros (+47 %). Pese a estas provisiones, Deutsche Bank logró en el primer semestre el resultado después de impuestos más elevado desde 2011 (3.300 millones de euros).

Los gastos no relacionados con intereses aumentaron en el primer semestre hasta 11.100 millones de euros (+8 %), sobre todo por el aumento de los gastos no operativos hasta 744 millones de euros (95 millones de euros un año antes) relacionados con litigios y costes de reestructuración.

"En el primer semestre de 2023 demostramos de nuevo un buen impulso de crecimiento a través de una cartera de negocio diversificada, poder de ingresos subyacente y resistencia del balance", dijo el consejero delegado de Deutsche Bank, Christian Sewing, al presentar las cifras.

"Esto nos pone en buen camino hacia nuestros objetivos financieros de 2025", añadió Sewing. Deutsche Bank va a recomprar acciones en 2023, a partir de agosto, por valor de hasta 450 millones de euros, para distribuir capital a sus accionistas. En total Deutsche Bank va a distribuir capital a sus accionistas por valor de 1.750 millones de euros en 2022 y 2023. A finales de junio tenía un ratio de capital ordinario de nivel 1 CET1 del 13,8 % (13 % hace un año). El ratio de eficiencia empeoró en el segundo trimestre hasta el 76 % (73 % un año antes). Deutsche Bank quiere reducir costes operativos en 2.500 millones de euros anuales hasta 2025.